La relación de amor-odio del presidente de los EEUU con el sector tecnológico continúa. Es innegable que Trump ha llegado a donde está gracias en buena parte al uso que le ha dado a las redes sociales; donde ha conseguido alcanzar a mucha gente deseosa de un discurso que rompiese las normas.

El equipo de Trump también ha sabido aprovecharse del funcionamiento de estas redes. Como cuando obtuvieron los datos de 50 millones de usuarios gracias a que Facebook permitía que las apps conectasen con las cuentas de nuestros amigos; un escándalo que aún duele en la red social.

Al mismo tiempo, el magnate multimillonario ha tenido no pocos encontronazos con el sector. Como por ejemplo, su polémica decisión de cerrar las fronteras y expulsar a ciudadanos provenientes de ciertos países; una decisión que afectó especialmente a las compañías tecnológicas, deseosas de contratar talento sin importar su nacionalidad.

Trump contra Google, ahora por los resultados

La amenaza de hoy va mucho más allá, al centrarse en una empresa en concreta. Y vaya empresa. Trump ha lanzado su nueva sarta de acusaciones contra Google, el gigante de Internet.

Como es habitual, Trump ha anunciado este ataque contra Google a través de su cuenta de Twitter. El presidente acusa a la página de mostrar resultados falsos cuando buscamos su nombre; en concreto, afirma que si buscamos “Trump News” (noticias Trump), sólo se muestran resultados de “los medios de fake news”.

Claro, que hay que aclarar que Trump tiene como costumbre atacar a los medios que no sean la Fox como “fake news”. Aparentemente, le molesta especialmente que la CNN, uno de los medios internacionales más seguidos de todo el mundo, aparezca en los primeros resultados.

Para Trump, todo esto es “muy peligroso”; aunque no ha aclarado para quién lo es. Por un poco de contexto, viene bien aclarar que la situación actual de Trump no es envidiable. Su antiguo jefe de campaña, Paul Manafort, ha sido condenado por delitos de fraude, y su ex-abogado Michael Cohen reconoció pagos ilegales durante la campaña; ambos apuntan al mismísimo Donald Trump, que ya están inmerso en varias investigaciones, especialmente por la influencia rusa en las elecciones en las que ganó.

¿Es el ataque a Google una cortina de humo para no hablar de esos problemas? Probablemente, sabiendo que en el pasado Trump ha usado tácticas parecidas en su cuenta de Twitter; con más de 54 millones de seguidores, sabe que tiene la mejor audiencia del mundo.

Cómo la ira de Trump puede afectar a Google

Es por eso que las consecuencias inmediatas para Google no están nada claras. Puede que estas palabras se queden en nada, o que mañana mismo Trump firme una orden contra la compañía; así de impredecible es su mandato.

Lo más probable es que Trump buscase algo en Google y no le gustasen los resultados. Esperemos que no busque “idiot” en Google, o si no los de Mountain View pueden temblar.

Los resultados de Google dependen de algoritmos; así que un cambio en los resultados supondría elegir resultados “a dedo”.

Nadie sabe cómo Trump pretende implementar estos cambios; y si se producen, hay pocas dudas de que serían un abuso de poder importante, similar al de ordenar a un periódico que no publique noticias negativas del presidente.

Actualizado: Google se defiende

Google ha respondido a las acusaciones de Donald Trump, negándolas todas categóricamente. En el comunicado, la compañía afirma que el buscador no está siendo usado para una agenda política, y que no cambian los resultados para favorecer ningúna ideología.

En vez de eso, afirma que los resultados mostrados son los más “relevantes”, y que el algoritmo es mejorado cientos de veces cada año para mejorarlos.

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