En los últimos años la educación ha estado en el punto de mira por no adecuarse a la velocidad correcta a las mejoras tecnológicas y al cambio de ciclo que la sociedad vive con la irrupción de Internet y todo lo que la rodea. Pese a eso, poco a poco vamos viendo cómo las escuelas y universidades se ponen al día, tanto en métodos como en maneras de implementarlos.
El Imperial College London ha anunciado hoy que empezará a usar la tecnología de hologramas para dar algunas clases a sus alumnos de forma regular, permitiendo que algunos docentes impartan clases desde lugares remotos.
Las pruebas empiezan ya
En una primera instancia estas clases serán dadas en las actividades de su Escuela de Negocio pero más adelante otras carreras y cursos se beneficiarán de esta nueva forma de dar clase.
En declaraciones a la BBC el Dr David Lefevre, director del Imperial’s Edtech Lab, ha dicho que “la alternativa es usar las videoconferencias pero los hologramas tienen una mayor sensación de presencia“. Y es cierto. Es mucho más parecido a una clase convencional que recibir la lección desde una pantalla, permitiendo un grado de movimiento que mantiene la atención del alumnado.
Interacción y múltiples personas
Los docentes podrán estar en cualquier parte, con un monitor delante de ellos que se calibrara para permitir que las personas del aula puedan interactuar con ellos.
El próximo jueves se inaugurará esta forma de dar clase, con dos docentes apareciendo en forma de holograma de forma simultánea, emitiendo desde Estados Unidos.
El método elegido no es estrictamente el de creación de hologramas, ya que usa una pantalla de cristal que permite luego aportar sensación de profundidad. A ojos de los estudiantes sí parecerá un holograma pero será mucho más económico realizar este tipo de eventos.
holograma profesor 1
Los responsables de la empres que desarrolla la tecnología dice que costarán cientos de euros cada uno, en vez de las decenas de miles que podría costar usar tecnología de hologramas.
Habrá un estudio en Toronto y otro en Los Ángeles, donde acudirán los invitados a dar clases. Como extra, las charlas podrán ser grabadas para emitirse más tarde e incluso ser enviadas en tiempo real a varias localizaciones de manera simultánea.