Ha sido en tiempos modernos cuando ha saltado la polémica de las pantallas táctiles en automóviles. Muchos no las consideran algo seguro y hay quién las califica de distracció, pero inevitablemente, están ahí. No las hemos ni adoptado y ya vislumbramos un futuro con pantallas 3D para coches.
Las 3 dimensiones no han sido especialmente populares en el mundo de la tecnología, especialmente en sus primeros años de vida. De hecho, la simple idea de implementarlas en un coche en el que tenemos que estar atentos a todo no es precisamente halagüeña.
Bosch ha anunciado que ha estado trabajando en esta clase de pantallas con un efecto 3D nativo, que no necesita de gafas para funcionar y que funciona de forma muy parecida al sistema que usan las Nintendo 3DS.
Las pantallas 3D para coches podrían hacerse una realidad
En palabras de Bosch, este sistema tiene beneficios directos para el conductor. Para empezar, aseguran que la condición 3D de la información ayudará a los conductores a percibirla más fácilmente y de manera más rápida.
Gracias al efecto de profundidad de la pantalla situada detrás del volante o en el salpicadero los conductores pueden captar la información importante con mayor celeridad. Esta información variará; sistemas de asistencia, mensajes de atasco, etcétera.
Otros usos que propone Bosch hablan de combinar esta tecnología 3D con una cámara trasera para echar marcha atrás. Veríamos en todo momento la imagen en 3D, para hacernos una idea mejor del entorno en el que estamos aparcando. Este detalle no es especialmente relevante; los asistentes de aparcado son cada vez mejores y en un futuro no muy lejano quizás no tengamos que aparcar con nuestras propias manos.
Bosch considera que si en el futuro la conducción se vuelve autónoma estas pantallas en 3D para coches desempeñarán un papel muy beneficioso para la interacción "humano-coche". La firma está especialmente interesada en ayudar a fabricantes del mundo automóvil a desarrollar sistemas de información y entretenimiento.
Habrá que ver de qué forma se implementa esta tecnología ya que, como decimos, la interacción 3D ha tenido un papel en el mundo tecnológico más bien discreto. Además, las pantallas táctiles ya suponen una distracción para no pocas personas, y estas pantallas podrían tener un inicio difícil ante estas personas.