El coronavirus es el líder absoluto de nuestro día a día. Es un tema que ha generado alarma social entre la gente, y que ha conseguido despertar los miedos de muchos. Internet se está viendo claramente beneficiada con este suceso, sobre todo porque se está disparando su uso en tráfico.
El tráfico en Internet ha aumentado poderosamente desde la aparición del coronavirus. DE-CIX, operador de puntos de intercambio de Internet, así lo ha anunciado en una nota de prensa clamando que ha conseguido un nuevo récord en lo que a transferencia de datos se refiere.
Concretamente, en la noche del martes DE-CIX consiguió alcanzar los 9.1 Terabits por segundo. Una auténtica barbaridad que, según explica la misma firma, se debe a la situación vivida con el coronavirus en la que el uso de Internet está teniendo un papel trascendental.
Récord de tráfico en Internet
Estge se constituye como un nuevo récord mundial de transferencia de datos. Nunca antes, según DE-CIX Frankfurt, se habían intercambiado tantos datos en hora punta en un punto de intercambio de la red. La misma empresa explica que parte de este suceso se debe, cómo no, al COVID-19. El uso de Internet está siendo clave en multitud de aspectos.
El más obvio es la búsqueda de información (con el riesgo de recibir desinformación) sobre el coronavirus. También existen otros factores en la ecuación; ante las medidas anti-propagación del virus, muchas personas recurren a Internet para entretenerse, ya sea jugando online, consumir contenido multimedia, etcétera.
Para que nos hagamos una idea de la ingente cantidad de tráfico de la que estamos hablando, hemos de entender que el terabit por segundo corresponde al visionado simultáneo de más de 230.000 vídeos en streaming de forma simultánea. Porque estamos hablando de Terabits, y no de Gigabits ni de Megabits por segundo, medidas más comedidas para medir la velocidad de transmisión de datos.
Los 9 Terabits alcanzados se traducen, aproximadamente, en el streaming simultáneo de hasta 2 millones de vídeos en calidad HD de forma simultánea. Si habláramos de la vida real, este volumen de datos equivaldría a unas 2.000 millones de páginas A4 todas puestas en pila. Una pila que, por cierto, sería de unos 200 kilómetros de altura.
Desgraciadamente, Internet se ha convertido en un hervidero de información falsa acerca del coronavirus. Es vital que si vas a informarte sobre esta situación lo hagas mediante cauces oficiales, como la OMS u organizaciones internacionales reputadas dedicadas a la investigación y al control de enfermedades multitudinarias. Y por supuesto, siempre que recibas información, contrástala antes de compartirla para evitar fomentar la alarma social en la que estamos sumidos actualmente.