¿Puedes fiarte de los benchmarks de tarjetas gráficas publicados en Internet?

Un reciente escándalo sobre los benchmarks de tarjetas gráficas publicados en algunas webs nos recuerda que nunca deberíamos tomar estos datos como absolutos.

Ahora que llega un cambio de generación de GPUs, con las nuevas Nvidia GTX 1080 y 1070, y las próximas AMD Radeon RX 480, es el momento de estar atento a los análisis de nuestras páginas especializadas favoritas para tomar la mejor decisión.

En esta ocasión, elegir entre las nuevas tarjetas de Nvidia y las nuevas tarjetas de AMD va a ser fácil; si no te importa pagar más, las Nvidia son más potentes, pero si tienes un presupuesto limitado, no hay mejor relación calidad/precio que la RX 480.

Los benchmark, importantes para saber qué gráfica comprar

Pero incluso si has elegido ya qué modelo de GPU vas a comprar, ¿de qué fabricante comprarás la tarjeta? ¿Asus, MSI, Gigabyte, EVGA, otro? Hay una gran variedad de modelos ahí fuera, cada uno con velocidades de reloj diferentes, con posibilidades de overclocking diferentes y con una variedad de soluciones de refrigeración.

En esos casos, echar un vistazo a los benchmarks publicados por algunas webs puede ayudarnos a tomar la decisión, pero lo que se ha descubierto esta semana es que puede que estos benchmarks no representen la realidad, y que la tarjeta que compres no de los mismos resultados por defecto.

msi tarjeta grafica 7

El escándalo afecta a los fabricantes MSI y Asus, y empezó cuando la web TechPowerUp, una de las referentes para los entusiastas, descubrió de casualidad que las gráficas que habían recibido de los fabricantes eran diferentes a las que se vendían en las tiendas.

Cómo los fabricantes usan overclocking en los benchmarks de tarjetas gráficas

La clave está en los “modos” disponibles en las gráficas MSI. Existen tres modos, “Modo silencioso”, que reduce la velocidad del ventilador si no vamos a jugar, “Modo gaming”, el modo normal con un poco de overclocking de serie, y “Modo OC”, con más overclocking para conseguir el mejor rendimiento. Podemos cambiar los modos usando la aplicación oficial de MSI incluida en un DVD con la gráfica.

Hasta ahí todo bien, esos modos son habituales en otros fabricantes porque nos facilitan mucho las cosas para hacer overclocking sin saber nada de ello. El problema es que las gráficas MSI que llegan a las revistas y páginas web vienen activadas por defecto en el “Modo OC”, mientras que las gráficas que se venden en las tiendas están en el “Modo gaming” por defecto.

Sí, esto se puede ver y cambiar con la aplicación, pero la inmensa mayoría de webs de tecnología no instalan este tipo de programas, porque suelen incluir bloatware o pueden afectar al rendimiento general del sistema. Para garantizar la igualdad, normalmente las gráficas se prueban como tal, sin software adicional.

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MSI sabía eso, y ese es el motivo por el que mandaba las gráficas pre-configuradas en el “Modo OC”, para conseguir unos resultados superiores al resto de fabricantes, unos resultados que luego los usuarios no podían repetir en sus equipos sin instalar el software adicional. Esto pasa con las GTX 1080 y las GTX 1070.

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Con el tiempo, otros fabricantes se han sumado a esta práctica, como Asus, y probablemente haya más. Ojo, la mejora no es gran cosa, y según algunas webs como PCPerspective está en torno al 1%. Parece poco, pero hay que tener en cuenta que cuando comparamos tarjetas con la misma GPU las diferencias serán mínimas, así que un 1% puede suponer la diferencia entre estar en todo lo alto en las tablas o no.

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El caso ha ganado tanta polémica que otros fabricantes se están aprovechando de ella, como EVGA, que ha lanzado una nueva campaña publicitaria basada en el lema “Lo que ves es lo que tienes”, presumiendo de que entrega los mismos productos a los periodistas y a las tiendas.

La justificación de MSI y Asus

MSI ya ha intentado justificarse ante estas acusaciones, asegurando que el Modo OC viene activado por defecto en gráficas para la prensa porque saben que esta no instala el software adicional, así que quieren “asegurarse” de que los benchmarks demuestran el mismo rendimiento que los usuarios pueden alcanzar con la aplicación.

asus tarjeta grafica

Para los que no quieren instalar el programa, MSI ofrece la opción de instalar una BIOS modificada con los valores del Modo OC. La respuesta de Asus es muy parecida, asegurando que deja las gráficas en Modo OC para “ahorrar tiempo” a los que tienen que hacer las pruebas, y que se puede activar y desactivar con el programa GPU Tweak II.

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Los análisis pueden influir mucho en las ventas, y este tipo de tretas lo demuestran. Los auténticos perdedores de esta polémica son las webs, cuyos benchmarks han quedado en entredicho (TechPowerUp se ha dado cuenta de que llevan años publicando análisis de tarjetas que hacen lo mismo), y los usuarios, que ya no saben de qué fiarse para comprar una gráfica.