Después de años concentrada en la gama alta, Apple por fin empezó a tener en cuenta a los usuarios menos pudientes. El hecho de que el iPhone "básico" ahora se llame iPhone 11 lo dice todo; ese es el iPhone que la mayoría debería comprar.
Claro, que eso nos despierta la duda de qué pasa con los modelos más caros y avanzados. En la generación actual, los iPhone 11 Pro y Pro Max son extremadamente parecidos al 11 normal; sólo detalles como las pantallas o una cámara más son diferentes. ¿Merece la pena gastar más de 1.000 € en ellos entonces?
Para solucionar esa duda, todo indica que Apple usará los modelos Pro para introducir nuevas tecnologías y así hacerlos más atractivos. Para este 2020, ya sabemos que Apple prepara un iPhone 9 más barato, pero para los próximos Pro también prepara sorpresas.
El iPhone Pro tendrá un nuevo sensor
Ahora un analista de Barclays puede haber descubierto una de estas sorpresas. Según una nota para inversores, los próximos iPhone contarán con una variedad de nuevos sensores.
Algunos de estos sensores se concentrarán en la parte delantera del dispositivo, y se usarán para FaceID; la diferencia es que no necesitan tanto espacio, así que Apple podría prácticamente eliminar el infame "notch" o muesca en la pantalla. Como mínimo, es seguro que será mucho más pequeña que las de ahora.
Pero esos no serían los únicos sensores nuevos. Una novedad en la trasera sería una cámara de tiempo de vuelo; esta es una técnica muy útil para calcular la distancia desde la cámara hasta el objeto que estamos fotografiando, y ya hay algunos dispositivos que lo incluyen, como el Samsung Galaxy S10.
Con esa información adicional, una aplicación puede saber la forma concreta de un objeto. Eso podría servir, por ejemplo, para realizar un escáner completo de un objeto cualquiera y crear una versión 3D en nuestro móvil. Por ejemplo, sólo con dar una vuelta alrededor de un jarrón podríamos tener una versión virtual.
No se sabe aún para qué se usarán esos datos, pero las posibilidades son numerosas; especialmente si recordamos que Apple ha apostado mucho por la realidad aumentada. Por ejemplo, esta funcionalidad podría ser usada para conseguir "copias virtuales" de objetos, que luego podamos colocar en cualquier sitio usando la cámara; imaginemos poder ir a una tienda, escanear una lámpara, y probarla en nuestra casa. Sin embargo, todo esto no son más que elucubraciones.