El pasado mes de octubre el nuevo iPad fue lanzado en España, el modelo más barato de tablet que ofrece Apple que ahora es incluso más atractivo, pese a no haber recibido un nuevo diseño como sí ha recibido el nuevo iPad Air.
Ahora, esta tablet es la protagonista de una de las historias más raras que han salido de este 2020, y eso ya es decir; una historia de sobornos, licencias de armas y agentes de la ley corruptos que parece digna de una película.
Tom Moyer, jefe de seguridad global de Apple, es el otro gran protagonista, al haber sido acusado formalmente por el fiscal del distrito de Santa Clara, California, de intentar sobornar a dichos agentes.
iPads de Apple para sobornar
Moyer ocupa el máximo puesto de seguridad de Apple desde noviembre de 2018, y entre sus funciones no sólo está evitar filtraciones, sino también en gestionar la seguridad del Apple Park y sus edificios y oficinas.
Su primer año fue especialmente complicado en ambos aspectos, empezando por una dura carta a los empleados en los que avisaba de consecuencias personales por filtrar productos a los medios; y ahora se ha revelado que también tenía problemas para mantener la seguridad en las sedes de Apple, al no poder obtener licencias de armas para los guardias de seguridad.
No es que los empleados contratados o la empresa no cumpliesen las condiciones: el problema estaba en dos agentes de la ley, un alguacil y un capitán, que retuvieron cuatro de estos permisos para sacar provecho propio.
¿Daño colateral?
Estos dos agentes consiguieron que Moyer les prometiese la entrega de unos 200 iPads, con un coste aproximado de 60.000 euros, a cambio de entregar las licencias de armas a la compañía.
Los iPads serían 'donados' a la oficina del sheriff de Santa Clara, según habría prometido Moyer; sin embargo, los agentes presuntamente corruptos pausaron el acuerdo cuando se dieron cuenta de que el fiscal del distrito estaba realizando una investigación, precisamente en los registros de licencias de armas.
Sus sospechas eran ciertas; en realidad, la investigación llevaba dos años en marcha, y ha terminado con los agentes y Moyer acusados de varios delitos; al empleado de Apple le acusan de intento de soborno.
Apple no ha realizado aún ninguna declaración oficial al respecto, pero el abogado de Moyer ha defendido la inocencia de su cliente, afirmando que es "daño colateral" de una disputa entre el sheriff de Santa Clara y el fiscal del distrito, dando a entender que esta investigación en realidad es el resultado de una lucha de poder. El abogado confía en que Moyer será absuelto en el futuro juicio.