Uno de las estampas más habituales de los puertos más exclusivos de España como Puerto Banús o Ibiza son los grandes yates. Embarcaciones de lujo que son hoteles náuticos y donde no falta un detalle, incluyendo las day-cruisers, estos pequeños barcos para escapadas de diario en alta mar. Eso sí, ninguno tiene aún nada parecido al Sarvo 37 de Sarvo Marine.
El ingeniero danés Sarvo Breckling, fundador de Sarvo Marine, ha dado a conocer la Sarvo 37, una exclusiva y elegante lancha eléctrica con un diseño totalmente rompedor y que no deja indiferente.
La compañía explica que la Sarvo 37 está inspirado en cómo sería traer un diseño clásico a la actualidad pero apostando por dejar la menor huella ambiental posible. Es por ello por lo que han utilizado plástico y aluminio reciclado para fabricarla. Además, apuesta por motores eléctricos que, con buenas condiciones climáticas, puede alcanzar los 130 kilómetros por hora (70 nudos).
Diseño minimalista
Lo más llamativo del diseño de este crucero de día de 11,25 metros está en su aspecto. La cuidada construcción en aluminio reciclado hace que su impronta atraiga todas las miradas. En concreto, el casco tiene un grosor de 6 mm mientras que la quilla sube hasta los 10 mm para apostar por mayor resistencia. Y es que está diseñado con la idea de adaptarse a las olas del Mediterráneo y el Báltico, "con la ubicación precisa de las baterías para contribuir al equilibrio general, lo que permite un viaje estable incluso con el mar agitado".
Para maximizar la energía de las baterías y para que la experiencia a bordo del sea de gran comodidad, la forma del casco con sus tres etapas es una parte clave del diseño. Desde la compañía explican que está inspirada en una barredora de minas danesa de época.
La proa afilada en forma de V del casco se aplana hacia la popa, lo que contribuye a la eficiencia energética, permitiendo el ahorro de energía, tanto a alta como a baja velocidad, es un objetivo clave para aumentar la autonomía.
A velocidades más bajas, la proa recta corta las olas como una cuchilla para un viaje cómodo y eficiente, con un empujón del acelerador, los 4.780 kg del barco comienzan a planear casi como un avión.
Sobre el uso del aluminio en el casco, la compañía explica que es resistente a la corrosión y requiere mucho menos cuidado que un casco de fibra de vidrio tradicional, "no es necesario encerarlo ni pulirlo", además, todas las sujeciones están hechas de acero inoxidable sin ácido. "Simplemente no se oxida".
Potencia eléctrica
Si llamativo es su exterior, más lo es lo que alberga en su interior. Dispone de un motor de 1.280 caballos superligero (164 kg) que produce un par y una potencia cuatro veces mayor al de un Porsche 911 Turbo S de 2019. "Este barco no solo es superior a un coche deportivo en tierra, sino que también superará en rendimiento a la mayoría de los barcos a motor utilizados para los récords de velocidad".
Cuando se pone a máxima potencia, llegando a los 70 nudos (unos 130 km/h), es como una bala plateada que cruza el horizonte. Una experiencia increíble que viene acompañada de algo que no es habitual en los rivales de la Sarvo: el silencio. Al apostar por un motor eléctrico, el único sonido que escucharan los tripulantes será el chapoteo del agua en el casco como único sonido.
Con respecto a la autonomía, el Sarvo puede viajar entre 70 y 100 millas náuticas (unos 130 y 185 km), dependiendo de las condiciones del mar y la velocidad a la que vayamos. Cuenta con unas baterías externas de emergencia para regresar a puerto en el caso de que fuese necesario.
Para recargar la batería se puede hacer tanto en un súper cargador (unas 5,5 horas), en una toma de corriente portuaria (15 horas), como en un enchufe de casa (unas 47 horas). Sin embargo, el sistema de batería se puede recargar por completo en una hora utilizando los últimos estándares CCS. (350kWh)
Con respecto al mantenimiento del sistema ePropulsion la compañía explica que es mínimo. Tiene muy pocas partes móviles. No tiene motor de arranque, bobinas de encendido, inyectores ni bomba de combustible, por lo que no es necesario reemplazar ninguna de estas piezas. Como en cualquier eléctrico.
A todo lujo
Más allá de la potencia y su diseño exterior, el Sarvo 37 es sobre todo una embarcación de lujo y lo demuestra. El interior de la cabina está cubierto con una elegante piel sintética resistente a la intemperie en combinación con detalles de aluminio pulido.
Asimismo, tanto la cubierta, la plataforma para nadar y la mesa están hechos de madera sintética duradera que ahorra peso. Los asientos del SARVO37 están suspendidos para absorber los golpes y las vibraciones, pero pueden girar para mirar hacia el sofá. Además, los cojines para el sol especialmente diseñados para ocupar el menor espacio posible, guardarse en la popa y se mantienen en su lugar con imanes cuando están en uso.
El Sarvo cuenta además con una cabina de lujo con una cama doble, un inodoro y una pequeña cocina. "Las paredes de aluminio cepillado aislado contrastan con el exquisito cuero sintético cosido a mano y los paneles de roble ahumado del interior", detalla la empresa.
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