Cómo proteger Chrome y Firefox de amenazas
Los navegadores se han convertido en una pieza imprescindible, y proteger Chrome o Firefox es más sencillo de lo que parece.
2 mayo, 2016 13:33Noticias relacionadas
El navegador se ha convertido en el nuevo sistema operativo, y para muestra sólo tenemos que ver a sistemas operativos como Chrome OS o Firefox OS. Cada vez tenemos más y más servicios que funciona a través de la web, servicios que incluso prescinden de un lanzamiento con aplicaciones o programas convencionales.
El futuro está en la nube y los navegadores son nuestra puerta de acceso a ellos, en otras palabras. Esto significa que cada vez los usamos más, pasan a ser los programas dominantes de nuestros ordenadores, y esto trae un efecto colateral; los atacantes se centran en atacar a estos navegadores para hacerse con los usuarios.
Por ello es vital proteger nuestro ordenador ante estas amenazas, y con unos sencillos pasos puedes asegurarte de proteger Chrome y Firefox de amenazas de seguridad de la mano de Decent Security, el blog de seguridad informática que mantiene el afamado @SwiftOnSecurity. ¿Nos acompañas?
Instalar uBlock Origin
La opción de instalar un bloqueador de anuncios parece controvertida, pero tiene su sentido si pensamos que algunos anuncios son capaces de infectar a los usuarios; algo que ha pasado muchas veces en los últimos meses. Para ello lo primero es instalar la extensión a través de los siguientes enlaces:
Una vez esté instalado, acudimos a la configuración de uBlock Origin y seleccionamos ‘Filtros de terceros’ entre las pestañas de arriba. Las listas que nos interesan en este caso para protegernos son las de ‘uBlock filters — Badware risks’ y las que están en la sección llamada ‘Dominios de malware’.
El resto de listas y extensiones también son opcionales y sirven para bloquear anuncios o amenazas a la privacidad, selecciona las que tú quieras. No somos nadie para decirte qué debes bloquear o dejar de bloquear, sólo os recomendamos esto para hacer vuestro navegador más seguro ante ataques, pero el debate de los anuncios en Internet está que arde.
Instalar HTTPS Everywhere
Seguro que muchos ya conocéis la importancia de utilizar conexiones HTTPS; hace que la conexión entre nosotros y el sitio esté cifrada, además de asegurar que el sitio es quien dice ser. El problema es que muchas páginas web, aunque tengan compatibilidad con HTTPS, siguen usando las versiones HTTP, más expuestas a ataques.
Para evitarlo en la medida de lo posible podemos usar HTTPS Everywhere, una extensión de la Electronic Frontier Foundation que fuerza conexiones HTTPS siempre que sea posible. Está disponible tanto en Chrome como en Firefox, y para muchos es algo que ya debería venir integrado en los navegadores.
En cualquier caso, esta es una instrucción más propia de los portátiles y dispositivos que se conecten a redes WiFi abiertas (se puede instalar en Firefox para Android, por ejemplo). Si tienes un ordenador de sobremesa y sabes de sobra que la seguridad de tu red está intacta, deja de ser obligatorio para convertirse en algo recomendable.
Activar las protecciones del navegador
Google Chrome cuenta con una función muy interesante que nos protege de amenazas de seguridad detectadas por Google. Sí, estamos hablando de esa pantalla roja (o naranja) de advertencia que aparece de vez en cuando, y que nos avisa de que el sitio web puede ser peligroso para nuestro ordenador. Para asegurarnos de que está activado, sólo tenemos que acudir a los ajustes con ‘chrome://settings‘, mostrar la configuración avanzada, y asegurarnos de que están marcadas las siguientes casillas:
- Enviar a Google automáticamente información sobre posibles incidentes de seguridad
- Obtener protección para tí y para tu dispositivo frente a sitios web peligrosos
Firefox, por otra parte, también cuenta con una protección integrada contra ataques de phishing (suplantación de identidad) y malware en general, avisandonos cuando visitemos una página web sospechosa o cuando descarguemos un archivo con origen raro. Para comprobar que estas protecciones de Firefox están activadas, debemos acudir a las preferencias de seguridad dentro del menú, y asegurarnos de que estén marcadas estas casillas.
- Warn me when sites try to install add-ons.
- Block reported attack sites
- Block reported web forgeris
Activa Flash sólo cuando lo necesites
Hace unos cuantos años era imposible navegar por Internet sin Flash Player: todo el mundo hacía cosas con el, todo el mundo tenía una página web que necesitaba el plugin en cuestión. Por suerte eso es agua pasada, y lo único que hace Flash ahora mismo es ser un dinosaurio tecnológico con un colador como protección ante ataques.
Por ello ya no es necesario activar Flash en todas las páginas web, ya no lo necesitamos aunque algunas páginas web sigan haciendo uso del complemento. Como medida entre tenerlo siempre activado y desinstalarlo, podemos hacer que el navegador nos pregunte cuándo queremos usarlo, dándonos siempre el control sobre cuándo se ejecutará.
Para hacer esto en Google Chrome sólo tenemos que acceder, en los ajustes, a la ‘Configuración de contenido’ en Privacidad, algo que podemos hacer tecleando ‘chrome://settings/content’ en la barra de direcciones. Bajamos hasta ‘Complementos’ y seleccionamos ‘Permitirme decidir cuándo ejecutar contenido de plugins’.
Asegurarse de tener la última versión
Por último, pero no por ello menos importante, es importantísimo tener actualizado el navegador para asegurarnos los últimos parches de seguridad. Para comprobar que tenemos la última versión sólo hay que seguir los siguientes pasos:
- En Google Chrome
- Pulsar menú -> Ayuda -> Información de Google Chrome
- En Firefox
- Pulsar sobre menú -> ? -> Información de Firefox
¿A que no ha sido difícil?
Como podéis comprobar, ha sido de lo más sencillo proteger nuestro ordenador un paso más allá ante posibles amenazas. No hemos tenido que hacer nada extraño, ni convertirnos en expertos en seguridad informática. Como el propio autor (o autora) de Decent Security dice, ‘cualquiera puede estar seguro’, sólo necesitamos las herramientas para asegurarnos y arreglar lo que está roto.