El nuevo diseño de Windows 10 se llama Project Neon, y ha sido filtrado antes de tiempo.

Windows ha cambiado mucho a lo largo de su historia; en ocasiones los diseñadores de Microsoft han acertado, en otras han fallado estrepitosamente. No sabemos en qué lado caerá Project Neon, pero lo que es seguro es que será algo diferente al aspecto que ahora tiene Windows 10.

A su favor tendrá que no estamos ante un cambio completo de la interfaz, como fue Windows 8; en vez de eso, sólo veremos cambios en el aspecto de las ventanas, en las animaciones usadas y en los colores elegidos. Pero la interfaz clásica del menú inicio en la barra inferior no se tocará.

El nuevo diseño de Windows 10 parece etéreo

Partiendo de eso, hay que decir que el nuevo diseño de Windows 10 resulta algo familiar. Tal vez sea por el uso de transparencias, que nos recuerdan a Aero, el diseño implementado con Windows Vista; aunque en este caso el objetivo no es hacer que las ventanas parezcan de cristal, sino simplificar el aspecto.

Windows 10 ya fue un cambio en esa dirección; en todos los elementos sólo se usa un color, para simplificar el uso de la interfaz y huyendo de un estilo más “realista” como el de antes. Por lo tanto, Project Neon será más una modificación a lo ya establecido en Windows 10.

El resultado es un aspecto etéreo, que se complementa bien con un nuevo componente llamado Acrylic; lo pueden usar los desarrolladores de apps para Windows 10 para crear partes difuminadas, como la barra lateral.

Ventanas que cambian según lo que estamos haciendo

Acrylic puede cambiar dependiendo de lo que haya detrás de la ventana, o incluso dependiendo de otros objetos de la misma ventana; como vemos en el gif animado, la parte difuminada puede cambiar, mostrando la portada de un disco o lo que haya detrás de esa parte, dependiendo de lo que estemos haciendo.

Estas partes difuminadas también pueden usarse para guiar al usuario; en la app de correo, vemos que cada parte que abrimos tiene un color de fondo menos transparente. El color de fondo también cambiará según el cursor del ratón; o si usamos un Hololens, cambiará en la zona en la que estemos mirando.

Las animaciones son la tercera novedad; son muy fluidas, según los que han podido verlas. Pero lo importante es que permiten a las apps cambiar dependiendo de nuestras acciones.

Por último, la barra de tareas también ha recibido un rediseño, pero aparentemente es poco probable que el cambio vaya a llegar a la versión final.

El nuevo diseño de Windows 10 no llegará con la próxima actualización del sistema, la Creators Update; en vez de eso, tendremos que esperar hasta la segunda gran actualización del 2017, para finales de año, aún sin nombre.