Cuando preguntas por un reproductor multimedia que simplemente funcione, la respuesta siempre es la misma: VLC. Este programa se caracteriza por “tragarse todo lo que le echen”, sin importar el tipo de archivo o el códec usado.

Es cierto que hoy en día cualquier reproductor decente hace lo mismo, y que ya no es un motivo de peso; pero eso no significa que VLC no siga siendo un programa muy recomendable.

VLC 3.0 se renueva por dentro para mejorar el rendimiento y la compatibilidad

Sobre todo con VLC 3.0, la nueva versión que llevaba ya tres años en desarrollo. No es para menos, ya que en esta ocasión el núcleo del programa ha sido revisado y modificado para incluir una gran cantidad de mejoras; algunas de ellas afectan al soporte de nuevo tipo de contenido.

Por ejemplo, VLC ya es compatible con vídeo en HDR; por el momento sólo es compatible con HDR10 usando el decodificador Direct3D 11 en Windows 10 Fall Creators Update. Si tenemos un monitor o un televisor compatible, y el archivo está codificado en HDR,  podemos disfrutar de unos blancos más brillantes, unos negros más negros, y en general, un color más realista.

También notaremos una mejora del rendimiento gracias a un nuevo soporte de decodificación por hardware; en iOS y macOS la aceleración por hardware se ha renovado completamente, y en Windows y Android se han sumado más opciones, como HEVC y Direct3D 11 en Windows, y HECV, MPEG-2 y VC1/WMV3 en Android.

Además, nuevos formatos como VP9 y WMV3 ahora son compatibles con decodificación por hardware en todas las versiones. Por supuesto, esta nueva versión de VLC añade compatibilidad con más códecs, algunos muy raros o exclusivos de algunos programas.

VLC recibe por fin soporte de Chromecast, por lo que podremos enviar el vídeo que estemos reproduciendo a nuestros dispositivos. Sin duda una de las funciones más pedidas.

Dónde descargar VLC 3.0

Un detalle importante es que VLC 3.0 sigue siendo compatible con algunas versiones de Windows XP y Windows Vista; pero futuras versiones eliminarán este soporte.

Con todas estas mejoras, es difícil no recomendar VLC si buscas un reproductor; además, es un proyecto de código abierto sin ánimo de lucro, disponible para todo tipo de sistemas operativos.