Descubren la razón biológica por la que sentimos picor
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El cerebro, esa gran máquina capaz de distinguir miles de sensaciones diferentes, como el calor o el frío, el tacto fino (en los dedos) o el grueso (resto del cuerpo), las sensaciones de las articulaciones o los movimientos corporales y un largo etcétera. Se conocen bien todos los “cables” que unen la piel y los receptores de esta con nuestro cerebro, cómo se cruzan y se vuelven a cruzar, y donde estaría la lesión cerebral si alguna de estas sensaciones no funciona correctamente. Pero, ¿y el picor? ¿sabemos como funciona? Pues antes no, pero ahora por fin sabemos cómo se produce.
Según los investigadores del Instituto Nacional de Salud de Estados Unidos, cuya investigación se ha publicado en el último número de Science, existe un enlace molecular entre las células sensitivas de la piel y las células nerviosas que transmiten esta sensación hacia el cerebro. Es decir, hay una molécula que une ambos tipos de células y sin la cual la sensación de picor desaparece, no existe. De momento solo se ha conseguido encontrar en ratones, pero como ya sabéis la probabilidad de encontrarlo también en humanos es relativamente alta.
La molécula en cuestión es un pequeño neurotransmisor (un mensajero del cerebro) llamado Polipéptido Natriurético B (NPPB en sus siglas inglesas). Su descubrimiento se llevó a cabo gracias al equipo de científicos capitaneado por el investigador Marcos Hoon, los cuales usaron ratones diseñados genéticamente para no producir este tipo de moléculas eran “inmunes” a una amplia gama de productos químicos que provocan picores:
“Hemos probado el NPPB por su posible papel en diversas sensaciones sin ningún éxito. Pero cuando expusimos a los ratones deficientes en esta molécula a varias sustancias que inducen prurito (picor), fue increíble. No sucedía nada, los ratones no reaccionaban, no sentían picor”
Posteriormente, los investigadores inyectaron el NPPB en los ratones y estos si que notaron el picor y empezaron a rascarse, lo cual sugiere que este neurotransmisor sirve como primer paso en la vía del picor-rascado.
Por otra parte, el grupo de expertos probó a eliminar las células de la médula espinal responsables de la respuesta del NPPB (en este caso la neurona NPRA) y demostraron que la ausencia de esta vía no alteraba la respuesta a otro tipo de sensaciones como la térmica, táctil o la estimulación dolorosa. Es decir, el picor funciona con su propia vía aparte.
La rareza de esta molécula no es que sea la única necesaria para que se produzca el picor y la consecuente respuesta (el rascado), sino que también es responsable de procesos importantes en el corazón, riñón y otros lugares de nuestro cuerpo.
Es decir, que si se quiere buscar una terapia que evite los picores (como en las reacciones alérgicas o de urticaria), habrá que tener mucho cuidado, pues la eliminación total de la molécula podría tener graves consecuencias.
Vía | io9.