Las impresoras 3D están consiguiendo muchos titulares últimamente, ya sea por las armas que se pueden crear con ellas o por las enormes posibilidades para la ciencia, el auto-consumo, e incluso la exploración espacial. Pero, como buenas máquinas que son, las impresoras 3D están destinadas a fallar algún día. De hecho, si se parecen en algo a las impresoras 2D nos dedicaremos mas tiempo a pelearnos con ellas que imprimiendo esculturas alucinantes. La diferencia es que, cuando una impresora de papel falla, la hoja se quedará atacada, aparecerá una mancha de tinta en mitad del documento, o simplemente saldrá todo en blanco. Pero cuando una impresora 3D falla, se puede crear arte.

Al menos eso es lo que piensan los creadores de este grupo de Flickr, en el que se recopilan algunos de los desastres provocados por una mala calibración o unas órdenes imprecisas. Desde figuras con formas propias de monstruos de películas de terror, hasta esculturas que parecen una oda al caos, pasando por simples y puras bolas de material.

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En cada imagen, podemos ver una descripción de lo que se pretendía crear, y cómo llegó a producirse el fallo para que otros usuarios no encuentren el mismo problema. Aunque mas de una escultura podría pasar perfectamente como una obra de arte en ciertas exposiciones.

Fuente | The Art of 3D Print Failure en Flickr