¿Los animales tienen emociones?
Este es un tema delicado y frecuentemente el debate acaba entre aquellos que tienen animales (a favor de las emociones) y los que no los tienen (en contra). Pero es que además se añaden los problemas de definición de concepto porque aquellos que no tienen una postura clara suelen abogar que depende del tipo de emociones de las que se hable, si son básicas (primarias o “instintivas” o si son avanzadas), pudiendo ser emociones pero no como las de los humanos y dependiendo del tipo de animal (por ejemplo primates versus otras especies menos evolucionadas). Hoy lo vamos a aclarar.
Para empezar quiero poner una serie de ejemplos que hablan por sí solos:
- La conducta de un perro cuando muere su dueño.
- La conducta de cualquier animal cuando se le hace daño.
- La conducta de dos animales cuando compiten por la atención de su dueño.
- La conducta de un animal cuando nos ve después de habernos ido un tiempo.
- La conducta de un animal cuando le gritamos.
- La conducta del animal cuando ocurre algo que no esperaba o escondemos su pelota.
Ejemplos de estas conductas están por todo, basta buscarlos por youtube y veremos muchos vídeos. Podríamos decir que (por orden) se corresponderían con Tristeza, dolor, envidia o celos, alegría, miedo, sorpresa. Pues bien, son emociones. Veamos como se ha ido argumentando su existencia o inexistencia.
¿Qué es una emoción? ¿Qué es un sentimiento?
Los sentimientos son el resultado (manifestación) de las emociones, son un estado afectivo (experiencia subjetiva) de larga duración.
Las emociones son expresiones psicofisiológicas o biológicas de estados mentales. Son causadas por la liberación de hormonas y neurotransmisores. Impulsan y motivan la conducta y se considera que son más breves que los sentimientos pero pueden ser más intensas.
Se considera que hay 6 emociones básicas: Sorpresa (o asombro), tristeza, asco, ira, miedo y alegría (felicidad).
Antecedentes en contra de la existencia de emociones en los animales:
- Aristóteles: Estableció el primer conocimiento sistemático del reino animal, diferenciando animales con sangre (anaima) de los que no la tenían (enaima). Describió tres tipos de almas: la vegetativa (nutrición y reproducción), la animal (nutrición, reproducción, percepción, movimiento y deseo), y la racional (exclusiva de los humanos, igual que la animal pero con la capacidad de razonamiento). Como vemos excluía la racionalidad o las cogniciones complejas del reino animal. Las emociones eran exclusivas de los humanos, en animales solo contempla deseos (similares a los instintos).
- Descartes: Consideraba a los animales como autómatas complejos, carecían de mente (res cogitans). Considera que el dolor físico no implica sufrimiento. Los animales no son capaces de sufrir ni sentir.
- El Cannon de Morgan (Ley de parsimonia): Una especie de navaja de Occam que postula que si una conducta animal (o no animal) puede atribuirse a un proceso psicológico más simple este es al que debe ser asignado (y no a un proceso psicológico superior). Reducen las emociones a factores dentro de un modelo estímulo-respuesta.
Antecedentes a favor de las emociones en animales:
- 1977 La liga internacional de los derechos del animal crea sus leyes de amparo y en 1978 establece la declaración universal luego aprobada por la ONU y la UNESCO.
- Darwin: Las diferencias con los humanos eran en grado y no en tipo. Las emociones son adaptativas y cumplen una función. Toda su teoría está publicada en el libro “La expresión de las emociones en el hombre y los animales” (1872). También podemos encontrar esta idea en el libro anterior, “El origen del hombre” (1871)
- Jane Goodall: Estudiando chimpancés comprobó que poseían emociones, ética y moralidad de grupo. Ellos y otras especies del mundo animal. Ella defiende incluso la existencia de personalidades en los animales. Por ello dedicó toda su vida a demostrar que esto era cierto.
- Frans de Waal: Estudió la conducta social de los primates. Estudió también su capacidad emocional y de empatía.
- Mark Bekoff: Es co-fundador con Jane Goodall de “Etologistas por el tratamiento ético de los animales”. Es escritor del Psychology Today donde escribe columnas sobre las emociones animales. Con libros como “El animal cognitivo” (2002), “Minding animals: awareness, emotions and heart” (2002) entre otros ha ido promoviendo el conocimiento sobre la capacidad emocional de los animales.
- En este enlace podéis encontrar ejemplos de experimentos llevados a cabo por algunos de estos autores sobre la cognición y emoción animal. Por ejemplo ratas que eligen liberar a compañeros antes que comer o animales que se niegan a comer si al hacerlo se inflige un shock a otro animal, los elefantes que entierran a sus muertos y visitan las tumbas, perros que manifiestan envidia cuando el dueño les ignora en favor de un perro de peluche (Stanley Couren afirma que los perros son como un niño de dos años a nivel emocional y de inteligencia, en parte gracias a la domesticación), incluso un gorila entrenado en el lenguaje de signos fue capaz de expresar mediante estos su tristeza cuando su mascota murió.
Actualmente….
Existe una rama (desde los años 70) conocida como la etología cognitiva que se encarga de estudiar la influencia de la conciencia y la intención (y las emociones) en el comportamiento animal. Y de hecho esta ciencia ha obtenido grandes logros. Hoy en día existen tantos estudios al respecto que es imposible enumerarlos.
Así mismo contamos con la “Cambridge Declaration on Consciousness“ (2012), que altamente recomiendo leer, creada por neurocientíficos de diversos ámbitos. Afirman que la estructura cerebral de los animales posee la capacidad necesaria para crear emociones, demuestran la base fisiológica de estas (que corroborará las ya encontradas muestras conductuales de las mismas). La Francis Crick Memorial Conference fue una de las más recordadas citas del estudio empírico y científico de la emoción animal.
Conclusiones:
Aunque todavía hoy en día hay quien lo discute yo creo que está muy claro el papel de las emociones en los animales.
Y, aunque se discuta, lo cierto es que ya se aplican medidas legales dando por cierto que los animales tienen estas emociones. ¿El problema? Hay muchos intereses de por en medio. Por ejemplo las farmacéuticas que hacen pruebas con animales, las empresas de cosméticos, incluso algunas empresas del sector alimenticio de productos animales, cuanto más bombo se le dé al sentimiento y emoción animal (o a su cognición) más difícil les será mantener la actividad que ejercen en el estado en el que tienen a los animales, y peor publicidad les llevará ello. Así mismo hay intereses políticos, sin entrar al debate mencionaré que por ejemplo en España (como en otros países) muchas tradiciones incluyen actos en los que aparece un animal (y no sale muy bien parado). Lo cierto es que todos somos más felices pensando que un animal no siente nada y ello nos sirve de excusa. ¿Lo cierto? Los animales SI sienten y sufren y tienen emociones. Por mucho que lo neguemos ya hay estudios que lo demuestran. Puede que los estudios no estén claros en respecto a si esa emoción es igual a la de un humano, pertenece a la misma estructura cerebral o si el animal sabe ser consciente de que siente esa emoción en un momento dado, pero, las sienten.
Fuente: Diferencias, Urban Times, Filopauextremadura, Evolución humana, Wikipedia (derechos animales), MUY Interesante,
Imagen: Pixabay, Pixabay, Pixabay, Flickr, Wikipedia, Wikipedia, Wikipedia.