Los gusanos que pueden colonizar tu cerebro
¿Tienes algún temor a los parásitos o a los gusanos? Deja de leer, porque este artículo va de los verdaderos gusanos en la cabeza que colonizan tu cerebro.
25 enero, 2015 19:53Noticias relacionadas
- India lanza la misión que le puede convertir en el cuarto país en llegar a la Luna
- Tu nuevo fondo de pantalla ha sido posible gracias a una vela solar
- Duro como una piedra o blando como la gelatina: este material dinámico cambia con la iluminación
- Esta lengua electrónica puede "probar" y analizar líquidos en solo un minuto
¿Tienes algún temor a los parásitos o a los gusanos? Entonces deja de leer, porque este artículo va sobre los verdaderos gusanos en la cabeza que pueden colonizar tu cerebro.
Si habéis visto series y películas como The Strain de Guillermo del Toro, entonces compartiréis el miedo que tengo a los parásitos que se adueñan de nuestro cuerpo de maneras misteriosas a la par que escalofriantes. Y, probablemente, os aterrorice la idea de un parásito que nos consume por dentro hasta llegar a nuestro cerebro. Si estáis en esa misma situación de temor ante la hipotética amenaza de que un gusano se haga dueño de nuestro bonito cerebro, enhorabuena, porque hoy os vamos a enseñar los gusanos que invaden tu cerebro. ¡Surprise!
Según podemos leer en CNN, estos gusanos de los que hablamos es de la especie de parásitos conocida como Spirometra erinaceieuropaei –toma ya-, y su especialidad es moverse por el cuerpo humano una vez los ingieres, teniendo el cerebro como sitio predilecto para sus gamberradas. Sólo se han registrado unas 300 infecciones entre 1953 y 2013, y se cree que su origen se encuentra en las zonas asiáticas en las que sus habitantes no disponen de una higiene adecuada a su alcance, como las zonas rurales.
Esto hace que sepamos muy poco sobre estos gusanos, y que sean desconocidos por una gran parte de la población, aunque están llegando a Occidente por dos factores en aumento: las importaciones de comida y el turismo a Oriente.
Lo peor del asunto viene cuando hacen de las suyas en nuestro cuerpo, en realidad: se mueven por todo el cuerpo (incluyendo ojos, tejidos y cerebro, siendo este último su favorito), y causan todo tipo de síntomas y daños según se vayan moviendo.
Al ser tan desconocido, los doctores suelen tardar en detectar la presencia de este parásito, y la única cura viable a día de hoy es extraer quirúrgicamente el gusano, aunque ya se está investigando para encontrar medicinas que nos quiten estos gusanos en la cabeza sin bisturís y cabezas de por medio, una combinación que no suele ser muy recomendable.