Como a todo aquel le pasará con su profesión o con algún tema del cual entienda, dominar el lenguaje acerca de lo que se está hablando es primordial, y en temas de salud es algo realmente importante. Personalmente, me sucede mucho que sin querer puedes estar haciendo llegar un mensaje un tanto confuso para aquel tipo de población que no es experto en esta área, y esto puede llevar a una confusión acerca de “lo que se debe de hacer y cómo se debe de hacer”.

Así pues, me declaro culpable. En este tipo de situaciones en las que no contemplo que lo que a mi me resulta fácil de entender, quizá para aquella persona que no se dedica a este gremio le queden los conceptos un tanto distorsionados, es por ello que me gustaría aclarar algunos conceptos que parecen claros (para mi), pero la manera de entenderlos de los pacientes puede llevar a una práctica errónea.

Aminoácidos esenciales

Seguro que en alguna ocasión has podido escuchar este tipo de declaración, bien en anuncios, o en conversaciones, y te hayas preguntado ¿qué es eso de aminoácidos esenciales?, ¿de qué se habla cuando se comenta “aminoácidos esenciales”?

Puede que seas un profesional del área de la nutrición, pero yo me pregunto, ¿entenderá la población que no es experta en este gremio a que nos referimos? Los aminoácidos esenciales son aquellos los cuales el cuerpo no puede sintetizar o “crear”. Las proteínas están formadas por aminoácidos, y algunos de ellos es necesario consumirlos en forma de alimentos, ya que el cuerpo no puede crearlos por si mismo.

Ejemplo: El triptófano se trata de un aminoácido esencial, por lo cual necesitamos consumirlo de los alimentos, algunos de los alimentos que poseen triptófano son: queso, pollo, huevos, pescado…

El 0% de materia grasa

“¡Ay que sano es “x” alimento que le han quitado toda la grasa!…” Esto es lo que muchas veces imagino que piensas cuando ves ese tan llamativo 0% en muchos productos, y ay que engañados vivimos… ¿Qué quiere decir ese tan fabuloso 0% en letras bien grandes y llamativas? Pues bien, quiere decir que a “x” alimento, efectivamente, le han reducido la grasa a menos de 0,5 gramos de grasa por ración o eliminado el contenido en grasa y ¡magia!

Aún de ese modo está buenísimo, ¿verdad? Claro, eliminan la grasa pero eso no lo transforma automáticamente en el mejor producto que puedes encontrar en un mercado, ya que pueden añadirle azúcar ó vete tú a saber qué otro tipo de sustancia que no sale nada bien parada tampoco. Recuerda que a veces, es peor el remedio que la enfermedad…

Carbohidratos o hidratos de carbono

¿Qué os viene a la cabeza cuándo leéis o bien habláis sobre carbohidratos o hidratos de carbono? A mucha gente, imagino, es el plato de pasta, el pan, los bollos, las galletas… y claro, como supuestamente esto (carbohidratos me refiero) es algo que debemos consumir ya que nos da “energía”, hay que comer, a diario y mucho.

Me preocupa mucho este tipo de interpretaciones erróneas, y me asusta porque las suelo escuchar con más frecuencia de la que me gustaría… ¿A qué carbohidratos nos referimos los nutricionistas cuándo hablamos de estos? Frutas, verduras, pan sí, pero en su forma integral o rico en fibra o de centeno, así como la pasta (sí, ¡sorpresa!, existe pasta integral o rica en fibra). Personalmente, siempre digo que me preocupa más que tu pan “normal” sea el pan blanco que consumir la leche entera, algo que parece verse como una aberración.

Estas serian algunas de las aclaraciones que considero importantes cuándo escuchéis o leáis acerca de declaraciones de nutrición, ya que en ocasiones nos bombardean con mucha información, y pienso: Si hay veces que me supone un tanto saturable a mí y esta es mi área y me apasiona, ¿de qué modo recibirá la información la población, la cual ni se dedica a esto, ni entiende a grande escala sobre el tema? Considero primordial el hecho de saber hacer llegar la información correcta, pero sobre todo, que se sepa interpretar correctamente el tipo de información que difundimos.

Y tú… ¿entiendes a tu nutricionista?