Los consejos para ligar según la neurociencia
Utilizar el lenguaje corporal
Cuando hablamos con un desconocido, la primera impresión que le causamos está más basada en nuestra apariencia y nuestro lenguaje corporal que en lo que decimos. Así que da igual que hablemos del tiempo, lo importante es usar los gestos adecuados. Según la ciencia da buenos resultados imitar las posturas de la persona a la que queráis agradar. Obviamente, no debéis hacerlo muy evidente, pero si usáis el disimulo adecuado conseguiréis que su cerebro os identifique como un igual y aprenda a confiar en vosotros. Por otro lado, también podéis usar posturas que realcen vuestras dotes masculinas o femeninas. Por ejemplo, los hombres podéis meter las manos en los bolsillos con los codos hacia afuera, de modo que mostréis un tórax más potente, y las mujeres podemos echar los hombros hacia atrás para realzar nuestro pecho.
Compartir unas risas
Si os dan a elegir entre una persona muy seria y alguien que siempre sonríe, ¿quién os atrae más? Puede que a alguien le guste el halo de misterio detrás de la persona seria, pero no me podéis negar que la risa da muchos puntos. Esto ha sido demostrado en experimentos como el realizado por los psicólogos Arthur Aron y Barbara Fraley, que reunieron a parejas de voluntarios que no se conocían y les hicieron practicar un juego en el que uno, con una pajita en la boca, tenía que enseñar un paso de baile a otro, que llevaba los ojos vendados. Lógicamente, el juego provocó cierta hilaridad, especialmente en algunas de las parejas, que resultaron sentir más atracción entre ellas.
Usar una buena banda sonora
Como sabéis, la música afecta muy directamente a nuestro estado de ánimo y, además, influye mucho a la hora de crear romanticismo en una situación. Esto fue comprobado por May y Hamilton, dos psicólogos que enseñaron diferentes fotos de hombres a un grupo de voluntarias mientras sonaba música de fondo. Los resultados fueron mucho más favorables cuando observaban las fotos con un rock suave de fondo.
Mirar a los ojos
El contacto visual es esencial para la atracción entre dos personas. Seguro que conocéis ese experimento en el que se hace que dos personas que no se conocen de nada se miren a los ojos durante un tiempo o el que, después de 36 preguntas más o menos íntimas, deben mantener el contacto visual durante unos minutos. Ambos experimentos a menudo acaban con las dos personas besándose. Y es que los cruces de miradas activan zonas cerebrales relacionadas con la recompensa. ¿Os atreveríais a probarlo?
Utilizar el miedo como estrategia
Como sabéis, cuando nos sometemos a una situación que nos causa pavor, nuestros niveles de adrenalina aumentan, algo que también ocurre cuando nos sentimos atraídos por alguien. Por lo tanto, si la primera cita tiene lugar, por ejemplo, en una montaña rusa es posible que ya tengáis parte del trabajo hecho.
En conclusión, si queréis una cita perfecta, llevad a la persona en cuestión a hacer puenting, ah, y miradla a los ojos mientras sonreís, imitáis sus movimientos y escucháis “still loving you”, de Scorpions. Si no funciona es que la otra persona no sabe nada de la vida y no vale la pena, así que probad con otra. Os lo dice la neurociencia.
Vía: UniDiversidad