Últimamente se han puesto muy de moda unos vídeos de youtube en los que destrozan con una prensa hidráulica todo tipo de objetos.

Puede parecer una tontería, pero lo cierto es que romper cosas o, simplemente,  ver cómo se rompen es uno de los mejores tratamientos desestresantes de todos los tiempos, hasta el punto de que existen empresas que, por un módico precio, te permiten destruir una amplia gama de artículos con la ayuda de un bate de béisbol o cualquier herramienta similar.

Por eso, la gran mayoría de vídeos de este canal se están haciendo virales, especialmente el último, en el que prueban a ver qué pasa al intentar destruir un diamante, conocido por ser uno de los materiales más duros que existen. ¿Queréis saber lo que ha pasado?

Esto es lo que pasa cuando introduces un diamante en una prensa hidráulica

diamante

Como una imagen vale más que mil palabras, os invito a ver el vídeo antes de leer la explicación.

¿Ya?

Si ya lo habéis visto habréis comprobado que la prensa lo pulveriza como si estuviese hecho de barro (si aún no lo habíais visto no os quejéis del spoiler, que os avisé para que lo vierais antes). Pues bien, es cierto que en el colegio estudiamos que el diamante es el material más duro del mundo, pero nosotros crecemos, la ciencia avanza y el diamante va perdiendo puestos.

¿Por qué se rompe el diamante tan fácilmente?

diamante-grafeno

Hoy en día se conocen algunos materiales más duros que el diamante, de los que hablaremos más adelante; aunque no por eso deja de ser uno de los materiales más duros que existen, debido a la disposición de sus enlaces covalentes. Sin embargo, eso no quiere decir que sea indestructible, como habéis podido ver hace un momento.

El motivo de esta incongruencia reside en que la clasificación de dureza se hace en base a la resistencia del material a ser rayado, mientras que la tenacidad del diamante, o capacidad para sobrevivir a la deformación como consecuencia de un gran impacto, es sólo medianamente buena.

Esto, además, se puede magnificar bajo otras circunstancias como el cortado al que se someten a veces para mejorar su transparencia, el tamaño reducido, o la mezcla con otros materiales foráneos.

Otros materiales más resistentes que el diamante

cadena-carbino

Como os decía, el diamante es un material muy duro, pero su tenacidad deja mucho que desear. De hecho, existen otros materiales, también producidos bajo condiciones de alta presión, cuya resistencia deja la del diamante por los suelos.

Un buen ejemplo es el del nitruro de boro cúbico, un material sintetizado de una forma similar a cómo se obtiene el diamante artificial a partir del grafito y que, aunque es un poco menos duro, sí que es mucho más tenaz.

Otro curioso caso es el de la lonsdaleíta, un material encontrado en algunos meteoritos, cuya forma, aun siendo hexagonal, se asemeja a la del diamante. Sin embargo, según algunos estudios, la lonsdaleíta es un 58% más dura que el diamante. Y también más resistente.

Sea como sea, ninguno de estos materiales superan al carbino, que ha demostrado ser más duro y resistente que el grafeno, el diamante y cualquier otra versión similar.

Sus propiedades fueron descritas por primera vez en 2.013, aunque no ha sido hasta hace unos meses cuando se ha podido sintetizar una cadena estable, abriendo con ello una nueva era en el campo de los súper materiales.

Pero bueno, volviendo al tema inicial: sí, el diamante no es tan resistente como creíamos, así que deberíais tenerlo en cuenta si os planteáis regalar uno en alguna ocasión especial. ¿Diamantes? ¿Flores? ¿Bombones? Al contrario de lo que nos habían hecho creer, los diamantes no son para siempre, pero el recuerdo del sabor del buen chocolate sí. Meditadlo.