Siberia, esa lejana zona del norte de Rusia, vuelve a ser la protagonista de un extraño fenómeno.

Si no tuvimos suficiente con las historias de monstruos gigantes invisibles, burbujas en la tierra, criaturas raras e incluso nuevos minerales, hoy añadimos algo más: Bolas de nieve gigantes, perfectamente esféricas, cubriendo casi 18 km de las playas del Golfo de Ob en Siberia.

Evidentemente los lugareños que habitan el pueblo cercano de Nyda no han perdido el tiempo y han fotografiado este curioso fenómeno meteorológico. De hecho en algunas zonas estas bolas de nieve gigantes han acabado barridas de forma natural y formando paredes de hielo.

Cómo se han formado las bolas de nieve gigante de Siberia

No hay una explicación científica 100% concluyente sobre cómo se forman estas bolas de nieve gigantes en las playas de Siberia, pero lo más probable es que se haya producido una perfecta combinación entre temperatura, formación de hielo, corrientes oceánicas y viento.

Según comenta el secretario de prensa del Instituto de Investigación Antártica, Sergei Lisenkoz, en primer lugar se produce un fenómeno natural primario (la formación de hielo y nieve densos sobre la superficie del agua), y posteriormente el viento, la temperatura y las corrientes oceánicas hacen el resto, produciendo este “empaquetado” de nieve en forma de esferas perfectas.

Los lugareños nunca habían visto un fenómeno similar, pero no es la primera vez que sucede. En otros lugares como el Lago Michigan (EE.UU.) y el Golfo de Finlandia se han observado bolas de nieve gigantes similares.

Siberia no es la única zona con bolas de nieve gigantes

Como veis, a pesar de que Siberia parece ser un imán para fenómenos extraños, no es el único lugar donde se forman bolas de nieve gigantes. De hecho en el comentado caso del Lago Michigan, los expertos de la Universities Space Research Association explicaron que el fenómeno se produjo cuando las corrientes del agua rompieron la superficie de hielo a pedazos, arrastrando el hielo hasta la orilla de forma continua hasta formas las esferas.

Pero, como ya hemos recalcado, las condiciones deben ser las justas en cuanto a temperatura, viento y corriente del agua. Sobre todo para conseguir bolas de nieve gigantes.

Otros casos son aquellos que originan la formación de rocas esféricas que ruedan por los acantilados de las playas, las cuales se forman por acumulación de sedimentos como calcita o sílice (en lugar de hielo).

Así pues, ningún ser extraño ha invadido Siberia y se ha puesto a hacer bolas de nieve en modo industrial. Simplemente se han dado una serie de condiciones meteorológicas inusuales a la vez, dando lugar a fotos para recordar.