Diríamos que el plan para poner un Tesla en la órbita de Marte es uno de los más locos de Elon Musk. Si no fuera por todos los demás, claro.

Una cosa no le podemos reprochar a Elon Musk, y es su ambición; el multimillonario magnate ha usado el dinero que ganó con Paypal para crear empresas como Tesla y SpaceX. Cada una la más innovadora en su campo.

Gracias a eso, es posible que pronto veamos una colaboración algo extraña entre ambas compañías; y todo por una especie de broma de su CEO.

Poner un Tesla en la órbita de Marte es la nueva locura de Musk

Como ya comentamos en Omicrono, SpaceX ha iniciado un nuevo plan para llegar a Marte y colonizarlo; y todo empezará el mes que viene, cuando el cohete Falcon Heavy realice su viaje inaugural hacia la órbita del planeta rojo.

Lo interesante será la carga que llevará, como ha revelado Musk en su cuenta de Twitter: un Tesla Roadster de color rojo cereza. Su Tesla Roadster personal, para ser más precisos. La idea es que, si nada explota, el coche se tire miles de millones de años en la órbita de Marte; sería todo un monumento a los logros conseguidos por Musk, que futuras generaciones podrán visitar cuando la humanidad colonice Marte.

Hay muchas maneras en las que el lanzamiento puede salir mal; el Falcon Heavy tendrá el doble de empuje que el siguiente cohete más grande. Será capaz de poner 64 toneladas en órbita terrestre, pero la misión irá mucho más allá, al menos según el Twitter de Musk.

Ya no sabemos cuándo Musk bromea y cuándo dice la verdad

Y decimos eso, porque poco después de publicar estos tuits y que se hiciesen virales, el millonario contactó con algunos medios para asegurarles que se había inventado la misión.

Al mismo tiempo correos electrónicos de SpaceX parecen confirmar que la primera carga del Falcon Heavy será un Tesla; y la misión ha sido confirmada por al menos un empleado de SpaceX.

Así las cosas, no tenemos ni idea si finalmente en la punta del cohete irá un coche o no. Pero dice mucho de Musk que todo el mundo crea que es perfectamente posible; con todo lo que hemos visto de Musk y de su sentido del espectáculo, nos lo creemos. Y no debería haber muchos problemas técnicos para conseguirlo, o al menos no más de los que ya supone una misión semejante con una carga “normal”.