Drones para el transporte de órganos humanos, ya ha sido probado con éxito
Un estudio muestra cómo los transportes de órganos humanos serán más eficaces con drones, siendo más ágil y presumiblemente más seguro.
23 noviembre, 2018 16:16Noticias relacionadas
- La fábrica de Martorell de SEAT se convierte en la primera española en recibir piezas con drones
- Hackers pueden controlar aparatos de anestesia y respiratorios a distancia por culpa de bugs
- Crean las gafas autofocales, que cambian de graduación dependiendo de dónde estés mirando
- La NASA buscará vida en Titán, la mayor luna de Saturno, usando un dron volador
En los transplantes de órganos, hay una parte del proceso que es la más critica: el transporte de órganos humanos. Normalmente se realiza por los medios de transporte más veloces que hay, como avión o helicóptero ya que este se transporta en condiciones óptimas para su conservación y cada minuto cuenta. Es vital que el trayecto se haga lo más rápido y de la forma más eficiente posible, ya que el órgano podría quedar inutilizado para el transplante.
La idea de que un dron pudiera transportar estos órganos ha estado considerándose desde hace tiempo, pero son muchos los motivos que hacen que la idea sea algo difícil de llevar a cabo. Ahora, un estudio ha demostrado que se puede, y que con las condiciones adecuadas es posible incluso que el órgano llegue sano y salvo a la persona que recibe el transplante.
Un dron transportando órganos: lo han probado y ha salido bien
Un estudio realizado por el Sistema Médico de la Universidad de Maryland ha demostrado que un dron sirve perfectamente para transportar órganos con éxito en caso de necesidad extrema. El estudio fue publicado en la edición de noviembre de IEEE Journal of Translational Engineering en Salud y Medicina.
El estudio realizó un experimento con un riñón que no era apto para un transplante, por lo que se pudo usar en la investigación. Pusieron el órgano en un recipiente especial similar al usado en las operaciones de transporte de órganos humanos y adicionalmente incluyeron un dispositivo que controlaba la temperatura del órgano. Además, controlaba también la altitud, la presión barométrica, la vibración y la ubicación. El dron usado fue un DJI Matrice 600 Pro, un dron comercial que cuesta unos 5 000 dólares.
Se realizaron varios vuelos de prueba para el experimento. La velocidad máxima que alcanzó el dron fue de 67 kilómetros por hora aproximadamente y el recorrido máximo que realizó fueron alrededor de 4 kilómetros. Antes y después del experimeto, los investigadores realizaron biopsias al riñón y determinaron que el vuelo del dron no afectó a la biopsia. Más aún; mostró que el número de vibraciones que había sufrido era menor al que sufriría en un viaje en avión.
Hay que aclarar que el riñón no era apto para un transplante, por lo que uno sano sí podría haber sufrido alteraciones. El órgano debe tener las condiciones ideales para que el paciente que lo reciba no sufra ningún problema, o peor aún, no pueda recibirlo. Por otra parte, este estudio abre la puerta a que este tipo de transportes se puedan realizar en un futuro, y los drones tengan una nueva utilidad.