La realidad aumentada es una de las tecnologías que más está creciendo en los últimos años; tal vez a un ritmo superior que la realidad virtual, ya que hay potencial de más usos interesantes en la vida real. Mientras que la realidad virtual nos lleva a otros mundos, la realidad aumentada mejora el nuestro; superpone gráficos sobre lo que vemos para obtener más información.

Hasta ahora la realidad aumentada ha tenido mucho éxito en móviles, especialmente en videojuegos o experimentos. Pero sus utilidades reales aún no se han explorado. Ahora Microsoft se ha convertido en la primera empresa que implementará realidad aumentada en un sector importante; sin embargo, puede que haya abierto una caja de Pandora al hacerlo.

Realidad aumentada para soldados gracias a las Hololens

La noticia es que Microsoft ha ganado el contrato con el ejército de los EEUU para implementar realidad aumentada para los soldados. Esto implicará la creación de nuevos prototipos de visores de realidad aumentada, adaptados para su uso en combate.

Estos dispositivos serán la evolución del Hololens, uno de los pioneros de lo que Microsoft llama “realidad mixta”; consiste en mostrar hologramas sobre un visor semitransparente. Estos pueden contener información del entorno, de objetos que cogemos, o presentar escenas de otros lugares.

Estas posibilidades han sorprendido a los militares, que ven mucho potencial en la tecnología; especialmente en el entrenamiento de nuevos soldados. Una de las frases que les convenció es que la realidad aumentada permite experimentar “25 batallas sin una gota de sangre antes de la primera batalla”. Es decir, que los dispositivos permitirán a los soldados vivir la experiencia de un combate sin peligro, antes de entrar en servicio. Estas simulaciones se mostrarán en los visores, como la posición de los enemigos o posibles contratiempos.

Tecnología de Microsoft en combate

Pero además, el contrato prevé el uso de esta tecnología en combates reales. Por ejemplo, la realidad aumentada podría servir para implementar una especie de visión nocturna en los cascos; el sistema barrería el área delante del soldado y mostraría la imagen nocturna en el visor. El pedido inicial será de 2.500 dispositivos; aunque esto puede abrir la puerta a un segundo pedido de 10.000 unidades.

Este contrato llega en un momento delicado para la industria tecnológica; las críticas a Microsoft, incluso de sus propios empleados, no se han hecho esperar. Otras empresas, como Google, tuvieron que salir de concursos públicos como este por la presión de sus empleados; muchos temen que las tecnologías que están desarrollando sean usadas con fines militares.

Sin embargo, Microsoft por el momento ha reafirmado que apoya al ejército de los EEUU. Lo que está claro es que la guerra está cambiando por culpa de las nuevas tecnologías.