Estados Unidos es el país del mundo que más porcentaje de su presupuesto anual invierte en temas relacionados con la seguridad. Cualquiera de sus ejércitos, cuerpos policiales y de inteligencia gozan de una salud económica envidiable que se traduce inevitablemente en ingentes cantidades de dinero para la investigación y desarrollo.
Las mejores armas, los aviones más avanzados y tecnologías secretas solo imaginables por los amantes de la ciencia ficción. Pero había algo que se les atragantaba: disparar bajo el agua.
Un medio físico tan complejo como el agua impedía que los soldados utilizasen sus armas (fusiles, subfusiles y armas cortas) pues el rendimiento de las balas era nefasto. Hasta ahora, que una compañía noruega ha desarrollado un proyectil muy capaz tanto en medios subacuáticas como al aire libre.
Las nuevas balas submarinas del ejército de Estados Unidos
El secreto de los nuevos proyectiles acuáticos es la cavitación. Un efecto físico que se produce cuando el agua líquida se transforma rápidamente en vapor al ser atravesada por un cuerpo a gran velocidad y regresa posteriormente a estado líquido.
En este último cambio de estado se generan ondas de presión que a la larga erosionan y debilitan estructuras a priori resistentes como el álabe de una hélice o incluso el pie de una presa. Esto que lleva de cabeza a ingenieros de todas las ramas es lo que ha usado la compañía DSG Technology encargada del proyecto.
Esta munición tiene un diseño específico de punta y de giro que permite aprovechar las burbujas de vapor generadas por la cavitación para eliminar cualquier tipo de rozamiento a lo largo de la bala. Solo la punta estaría en contacto con el agua.
Business Insider apunta a que las nuevas balas están siendo probadas por organismos militares donde las están sometiendo a todo tipo de ensayos. Entre ellos, los disparos desde dentro del agua hacia el exterior. Algo que era impensable en un arma de mano por la diferencia de densidades entre el agua y el aire.
Según ha podido conocer el medio estadounidense Defense One, las balas serían capaz de recorrer 60 metros bajo el agua y tendría la fuerza suficiente para penetrar 2 centímetros de acero desde 17 metros.
Unas cifras muy interesantes teniendo en cuenta el escaso equipamiento necesario.Las balas podrán ser utilizadas en armamento normal y como extra, para disparos submarinos, se tendría que implementar una bombona de gas que hará de atmósfera portátil.
DSG Technology se habría puesto en contacto con varios países para vender su nueva tecnología balística aunque el portavoz de la compañía que ha hecho esas declaraciones no ha señalado a naciones en concreto.