Aunque los proyectos y desarrollos militares se llevan en el más absoluto de los secretos, el espionaje industrial está a la orden del día tanto en compañías privadas como públicas. En España, como parte del consorcio europeo que fabrica aviones militares, sabemos muy bien eso de los ataques de hackers llevados a cabo desde países como China o Rusia con el fin de recabar la máxima cantidad de información con el fin de conocer los últimos movimientos tecnológicos de las potencias mudiales.
Las grandes corporaciones dedicadas al diseño de instrumentos, equipos y vehículos militares son uno de los objetivos a los que los piratas informáticos atacan con más ahínco. No se sabe si como resultado de estos ataques a distancia o con un espionaje mucho más 'artesanal', existen algunos proyectos militares de países enfrentados que se parecen entre ellos y no se duda en mostrarlos al mundo.
Los aviones son uno de los más evidentes, pero en países como Corea del Norte -que no cuenta con una industria aeronáutica avanzada- podemos ver diseños que, en apariencia, pueden pasar por alguno de los cocinados dentro de las instalaiciones militares de Estados Unidos, Rusia o Japón.
Las copias de Corea
Sacar hacia adelante proyectos militares tiene un coste que muchos países no pueden asumir. En ocasiones, se compran equipos más o menos anticuados a países que necesitan renovar su material, pero otras veces se pasa a copiar directamente. Y no necesariamente por un ahorro sustancial de costes, como veremos en el siguiente punto. Esta situación se acentúa todavía más en países tan herméticos como Corea del Norte, donde es realmente complicado conocer el estado real de la industria militar.
Lo poco que se sabe es gracias a los puntuales desfiles militares con los que Kim Jong-un saca músculo bajo la atenta mirada internacional. En el último, celebrado hace tan solo unos días, el ejército del país mostró alguna de las joyas de la corona. Uno de los más esperados fue el Hwasong-15, un misil de alcance intercontinental que supone una de las mayores amenazas del país asiático. Pero entre toda la amalgama de vehículos que desfilaron se pudieron ver algunas 'copias' muy interesantes.
Y es que las casualidades en el mundo militar no existen. En las imágenes comparativas que ha publicado Defence se puede contemplar cómo alguno de los todoterrenos blindados, tanques y camiones de Corea del Norte son -casi- iguales a diseños ya existentes en otros países. Es cierto que diseñar un todoterreno blindado que no se parezca a otro es muy complicado, pero es que Corea del Norte ha copiado centímetro a centímetro el frontal del Komatsu LAV, un todoterreno blindado del ejército japonés.
Lo mismo ocurre con los camiones de transporte, donde Corea del Norte parece haber mirado a Estados Unidos para desarrollar la cabina del suyo propio. Otro de los vehículos que Corea del Norte parece haber copiado es su nuevo tanque; aparentemente inspirado en el T-14 Armata de Rusia y el M1A2 Abrams estadounidense. También un modelo muy concreto de remolque.
No solo Corea
Uno de los países que se ha especializado en la copia de ingeniería militar internacional es China. El gigante asiático ha protagonizado alguna de las copias más burdas en los desarrollos de aviones cazas en las últimas décadas.
El caza F-16 fue uno de esos proyectos fallidos de Estados Unidos debido a los altísimos costes por unidad. El desarrollo inicial se produjo en los años 80 y poco tiempo después, la inteligencia del país norteamericano se dio cuenta de que China estaba trabajando en un modelo muy parecido. Todavía hoy no se sabe si el diseño del Chengdu J-10 fue una copia directa o le sobrevino a China gracias a que compró los planos a Israel, país que participó en el diseño original de la aeronave.
Tampoco Rusia, país aliado de China, se ha librado de las copias. El Sukhoi Su-27 es uno de los cazas de referencia del ejército y el Shenyang J-11 y J-16 parece que lo copiaron. Lo mismo con el Su-33, modelo más avanzado, que los chinos hicieron lo propio con el Shenyang J-15. Los drones tampoco han estado exentos de copias de dudosa procedencia, como es el caso CASC Caihong-4 que se parece mucho al MQ-9 Reaper del Ejército de Estados Unidos.