La rueda, uno de los inventos tecnológicos más antiguos de la humanidad, sigue dando de qué hablar. Y es que las últimas novedades en ingeniería están permitiendo avanzar de forma exponencial en estos elementos que tan poco han cambiado en las últimas décadas.
Más todavía cuando muchos ya miran con ansias a Marte y a la Luna como las próximas paradas de colonias humanas permanentes, con unas necesidades que nada tienen que ver con las que tenemos en la Tierra. Y así es como nace la "Rueda origami transformable de alta capacidad", según la han bautizado sus propios creadores en Science Robotics.
La reinvención de la rueda permite ajustarse en marcha a las necesidades del momento. Pasando de una rueda alta y esbelta para los terrenos más complicados a otra con mucha más superficie de rodadura y con menos perfil. La principal novedad es que utiliza una tecnología integrada dentro de la rueda que permite cambiar la forma sin que el conductor tenga que bajarse del vehículo en ningún momento.
Cada una de las ruedas tiene una resistencia que permite soportar hasta 1.019 kilogramos, incluso mientras se está transformando. Todo ello gracias al sistema de origami que encaja las piezas de forma milimétrica como si de un engranaje se tratara y no deja lugar a las debilidades.
En el formato más esbelto, el indicado para el 'modo todoterreno', la rueda deja al aire todo un esquema de tacos de goma flexibles que absorben las irregularidades del terreno como piedras o desniveles. Al mismo tiempo que elevan al vehículo unos centímetros extra alcanzando un diámetro de 80 centímetros.
La otra configuración es más apropiada para terrenos asfaltados. Algo así como un 'modo carretera' con 46 centímetros de diámetro. En este caso, la rueda disminuye el radio al tiempo que se ensancha y el vehículo desciende. El dibujo de la rueda, en este caso, es mucho menos agresivo y la capacidad de rodar por terrenos complicados disminuye considerablemente.
Los creadores, en los diferentes vídeos que han subido a Internet, prueban los neumáticos en pequeños robots que bien podrían ser los chasis de los futuros coches tripulados en Marte.
Eso sí, por el momento y según se puede ver en los vídeos, nada tiene que ver con la fineza de rodadura de los neumáticos actuales. Donde las bandas y los dibujos están especialmente diseñados para ofrecer el mejor agarre y comodidad. La rueda de origami, en cambio, sigue sin contar con una superficie lisa en ninguno de sus formatos lo que se descarta su uso a corto plazo.
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