El ruido infernal de las máquinas de limpieza en las madrugadas de las ciudades tiene los días contados. La clásica barredora que se puede ver en las calles de todas poblaciones de España se actualiza y lo hace aplicando los últimos estándares tecnológicos como la conducción autónoma y el uso de baterías. Algo así como una aspiradora estilo 'Roomba' gigante con mucho más poder de succión y autonomía.

Esa es solo una de las patas del potencial de electrificación del conjunto de vehículos de servicio público. Otra muy importante tiene que ver con la flota de camiones de la basura que recorren las calles de pueblos y ciudades a diario emitiendo, nuevamente, mucho ruido y contaminación con sus motores diésel.

Tanto en el caso de las barredoras que podemos ver por las calles como con el camión de la basura, siguen todos los días exactamente la misma ruta acarreando prácticamente el mismo peso. Esta circunstancia los posiciona como unos privilegiados para dar el salto a lo eléctrico, donde la flexibilidad a la hora de cubrir rutas es bastante más limitada.

Una 'Roomba' XXL

En ello está trabajando la compañía finlandesa Trombia con su dispositivo llamado Free, cuyo proyecto piloto se llevó a cabo del 19 al 27 de abril de este mismo año 2021. El trabajo del robot consistió en pasar -y limpiar- por las calles de un barrio de la capital Helsinki en horario de tarde, justo después de que termine el trasiego diario y los transeúntes regresen a sus casas.

Un escenario perfecto donde ha demostrado que se trata de una tecnología válida y madura. Posicionándose como la primera máquina barredora eléctrica y autónoma del mundo. "La barredora de calles autónoma y eléctrica es tan silenciosa que permite barrer las calles por la noche, dificultando el tráfico lo menos posible", comentó Antti Nikkanen, director de Trombia Technologies.

Esos embotellamientos de tráfico producidos por las barredoras son solo otro de los problemas que se evitan usando el nuevo sistema. El mecanismo de succión alimentado por diésel de las máquinas barredoras tradicionales se ha sustituido por otro que usa un motor eléctrico mucho más eficiente.

Otro de los programas en los que ha participado Trombia Free lleva a la barredora autónoma hasta la ciudad de Espoo, también en Finlandia. Allí, la compañía ha arrancando otro proyecto piloto que se lleva realizando desde el mes de marzo y en el que el dispositivo se está encargando de la limpieza de los carriles bici de la ciudad del sur finlandés.

"Los dispositivos de limpieza Trombia Free usan menos del 15% de la energía necesaria [un ahorro del 85%] por las tecnologías de barrido de succión pesada disponibles actualmente", según recoge la propia compañía en un comunicado. Y todo ello sin renunciar a ningún sistema de seguridad.

La barredora Trombia Free está equipada con una tecnología de visión artificial basada en la tecnología LIDAR que es fiable bajo cualquier condición meteorológica. "El desarrollo del algoritmo avanzado se ha llevado a cabo para absorber datos sobre objetos de diversas fuentes y generar millones de ilustraciones del objeto a la vez". Esto último permite a la barredora autónoma esquivar objetos o evitar ponerse en situaciones comprometidas.

Más allá de la barredora

Como apuntamos antes, el camión de la basura es otro de esos eslavones con potencial eléctrico que, por el momento, no terminan de arrancar. En España contamos con algunos ejemplos muy interesantes de uso de camiones de la basura eléctricos en ciudades como Alcalá de Henares (Madrid) -desde el 2019- y en Barcelona -desde julio de 2020-.

En ambos casos se ha comprobado que este tipo de camiones con rutas tan bien estudiadas y acotadas son los ideales para usar tracción eléctrica. A una escala mucho mayor nos encontramos con el caso de la ciudad de Nueva York, en la que llevan trabajando en un programa de sustitución de camiones diésel por otros eléctricos desde hace casi un año.

En la ciudad estadounidense hay más de 2.000 camiones de basura y la sustitución acaba de comenzar hace tan solo unos días en los que el fabricante Mack ha enviado las primeras unidades. Los planes pasan por crear estaciones de carga inalámbricas de alta intensidad para usar con sus ultracondensadores.

La idea es emplazar estos cargadores a lo largo de las rutas designadas para que los camiones puedan ir recargando las baterías constantemente. Este cambio de rumbo viene a colación del objetivo del presidente Joe Biden de cambiar por completo toda la flota de vehículos gubernamentales por unos eléctricos.

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