Tras el rotundo éxito de su misión a bordo de la cápsula New Shepard, Jeff Bezos quiere más. El que fuera -hasta hace unos días- CEO de Amazon fundó en el año 2000 Blue Origin con el objetivo de conquistar el espacio participando en los diversos contratos públicos como los que la NASA anuncia puntualmente. Algo que a SpaceX y a Boeing les ha salido especialmente bien pero que en la compañía de Bezos no termina de cuajar.
Uno de esos megacontratos tiene que ver con los nuevos viajes a la Luna que la NASA tiene previsto en 2024 a través del programa Artemis. Un megacontrato en el que Blue Origin se había postulado como candidato para fabricar el lander lunar (encargado de transportar a los astronautas hasta la superficie del satélite) y que quedó fuera en abril cuando la NASA eligió a SpaceX.
Esto último no sentó especialmente bien en la compañía y, junto con Dynetics que también quedó fuera, pusieron una reclamación en el organismo de supervisión para que se tomara una decisión. Esta reclamación tiene como fin que la NASA reconsidere tener un par de compañías trabajando en el lander lunar en vez de solo una como es actualmente.
Justo a una semana de la publicación de la decisión -prevista para el lunes 2 de agosto-, Bezos ha mandado una carta abierta al administrador de la NASA Bill Nelson con una importante rebaja en el precio de contratación de su tecnología.
Bezos, de rebajas
En concreto, Bezos ha recalcado que renunciaría a todos los pagos del año fiscal actual y a 2.000 millones de dólares en pagos de contratos durante los 2 próximos años si la NASA tiene a bien emplear el módulo de aterrizaje lunar de Blue Origin. "Esta oferta no es un aplazamiento, sino una renuncia total y permanente a esos pagos", reza la carta.
Por si eso fuera poco, en la misma misiva se anuncia que Blue Origin realizará el desarrollo y lanzamiento de una misión pionera en órbita terrestre baja de su sistema lander para reducir aún más los potenciales riesgos.
"Por último, Blue Origin aceptará un contrato firme a precio fijo para este trabajo, cubrirá cualquier sobrecoste de desarrollo del sistema y protegerá a la NASA de las preocupaciones de aumento de costos de los socios". Todo ello con el objetivo de que la propia Agencia Espacial de Estados Unidos reconsidere su posición acerca de tener dos sistemas en desarrollo paralelo -la de SpaceX y la potencial de Blue Origin- para ejecutar las misiones de lander lunar.
La postura oficial de la NASA es la de mantenerse en un segundo plano, aunque afirman que la carta les ha llegado. "La NASA tiene conocimiento de la carta abierta de Blue Origin dirigida al administrador de la NASA Bill Nelson con respecto a la selección de HLS [Human Landing System, donde se encuadra el lander] que la agencia anunció en abril", según las declaraciones de un portavoz a The Register.
"Como resultado del litigio en curso relacionado con las protestas de HLS presentadas ante la Oficina de Responsabilidad Gubernamental (GAO) [el organismo de supervisión], la NASA no proporcionará comentarios en respuesta de la carta para mantener la integridad del proceso de adquisición en curso y la adjudicación de este asunto por parte de la GAO", concluye y remite al comunicado publicado en abril sobre la adjudicación del contrato a SpaceX.
También te puede interesar...
- Richard Branson adelanta a Jeff Bezos con Virgin Galactic: inicia el turismo espacial para millonarios
- Así son los módulos europeos clave para llevar humanos a la Luna
- La NASA confía en Elon Musk: usará el Falcon Heavy para lanzar su estación espacial lunar