La guerra entre Ucrania y Rusia sigue en sus momentos más álgidos. En España se viven las consecuencias de dicho conflicto, que repercuten directamente sobre los precios de la luz y la gasolina en el día a día. El armamento que ambos bandos están usando está siendo determinante para el conflicto, y Rusia podría estar usando un tipo de tecnología especial que estaría haciendo verdaderos estragos en las defensas antiaéreas ucranianas: misiles "dardos señuelo".

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Según relata el Daily Mail, los servicios de inteligencia estadounidense habrían detectado un nuevo armamento militar ruso increíblemente efectivo contra estas defensas. Estos "dardos señuelos", lanzados con misiles Iskander-M, tienen dispositivos que producen señales de radio para despistar a estas fuerzas terrestres y así impactar con seguridad.

Una tecnología que Rusia se habría negado a exportar a otros países ante el riesgo de que estos inutilicen dicho armamento realizando ingeniería inversa. Se cree que Rusia estaría lanzando este tipo de misiles desde lanzacohetes móviles ubicados en Rusia y Bielorrusia.

Misiles "dardo señuelo"

Estos dispositivos miden aproximadamente unos 30 centímetros y tienen forma de dardo, de ahí su nombre. Son blancos, con una cola naranja y son lanzados con misiles balísticos Iskander-M. Estos dispositivos se lanzan cuando el misil detecta que ha sido atacado o detectado por los sistemas de defensa aéreas ucranianos.

La idea es simple: cada uno de estos "dardos" producen señales de radio que interfieren con los radares ucranianos que intentan atacar al Iskander-M previamente lanzado. Están equipados con una fuente de calor que atrae a los misiles entrantes. Todos estos detalles han sido descritos por un funcionario de la inteligencia de los Estados Unidos totalmente anónimo.

Un arma que ha comenzado a aparecer en ciertas publicaciones y que en un principio se pensaba que eran dispositivos de racimo, ya que su tamaño y forma es similar. Dado que no existen registros o documentos que corroboren el uso de estos sistemas en los misiles Iskander-M, la versión de que Rusia no ha exportado este tipo de armamento se corrobora.

Algunas declaraciones recogidas por el The New York Times, avalan el misterio alrededor de este tipo de munición. Es el caso de Richard Steves, veterano del ejército de Reino Unido y especialista en el desarmado de artefactos explosivos, que aseguró no haber visto nunca nada similar a esto. No obstante, el hecho de que este tipo de armamento se haya usado en estos momentos podría ser una brecha de seguridad para este tipo de armamento.

Estos misiles Iskander-M tienen un alcance de hasta 500 kilómetros y tienen una ojiva capaz de destruir grandes edificaciones e incluso fortificaciones reforzadas. Se estima que los lanzamisiles que los están usando tienen capacidad para 2 misiles por recarga y están repartidos por Bielorrusia y Rusia. Según los expertos, Ucrania había estado teniendo problemas para interceptar los ataques a la capital que Rusia ha estado realizando en los últimos días.

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