Este espectacular edificio que parece flotar en el aire proporciona luz, calefacción y refrigeración a todo un barrio
El nuevo Cloud Engine Energy Center de la ciudad china de Jingdezhen incorpora las últimas tecnologías en producción y gestión energética.
Las ciudades están en permanente estado de mutación. Los edificios crecen hacia arriba hasta alcanzar dimensiones colosales, como el recién anunciado rascacielos para viviendas más alto del mundo. Pero no todo se dirime en las alturas. También hay planes urbanísticos, como el Jardín del Viento, la espiral vegetal que rebajará 4 grados la temperatura de Madrid, que lo que pretenden es redefinir un espacio público o devolverlo a su época de esplendor añadiendo nuevos usos. Es el caso de la ciudad china de Jingdezhen y el megaproyecto arquitectónico en torno a Taoxichuan, una extensa zona de fábricas dedicadas desde mediados del siglo XX a la producción de cerámica.
Además de la rehabilitación de los edificios, el masterplan de Taoxichuan diseñado por David Chipperfield Architects conlleva la construcción de un museo, un mercado de productos locales y una segunda fase que incluye un complejo para las artes escénicas. Si en los países nórdicos se proyectan gigantescas baterías térmicas para proporcionar agua caliente y calefacción a ciudades enteras, aquí han optado por construir el Cloud Engine Energy Center, encargado de centralizar los sistemas de calefacción, refrigeración, presión de agua y electricidad de toda la zona.
El diseño de este singular edificio, a cargo de la firma de arquitectura Xing Design, se divide en dos: una sección subterránea, donde se concentran los sistemas de generación y gestión de energía, y una sección visible, apenas conectada con la base, lo que proporciona una sensación de ligereza y además sirve como voladizo para crear sombra.
Esta sorprendente construcción en la que el metal y los tubos industriales son los grandes protagonistas, se integra de manera ejemplar en medio de un parque público. En la estructura suspendida se encuentran siete enormes torres de refrigeración, el centro de control y salas de reuniones, que parecen flotar sobre la gran extensión verde y ofrecen unas vistas panorámicas inmejorables de todo el entorno.
Además de las innovadoras soluciones de ingeniería utilizadas por Xing Design para construir el edificio, el Cloud Engine Energy Center cuenta con varias novedades tecnológicas en lo referente a la producción eficiente de energía, como enfriadoras centrífugas de frecuencia variable o calderas inteligentes de agua caliente a gas. Eso Además, su gestión centralizada permite minimizar el consumo, una apuesta por la sostenibilidad que busca combatir los peores efectos del cambio climático.
En una continua conversación entre el interior y el exterior del edificio, entre su forma y su función, los arquitectos chinos apostaron por la estética industrial, con etiquetas en chino y en inglés serigrafiadas y bien visibles tanto en las tuberías exteriores como en los puntos de acceso.