Estimado profesor Marina:
Hace una semana participé con usted en un coloquio en la Universidad Nebrija, en el que invitó a los cuatro partidos presentes a fijar de inmediato una hoja de ruta para echar a andar el pacto educativo sin esperar a la celebración de la cita electoral. Ninguno de los presentes podíamos asumir ese compromiso en nombre de nuestras formaciones, pero la idea era buena: fijar unas bases mínimas que supongan el punto de partida de un gran acuerdo futuro, y hacerlo ahora, antes incluso de que empiece la campaña.
Si aceptamos todos, y si lo hacemos ya, habremos alejado la sospecha de querer buscar con esto réditos electorales. Sería la prueba definitiva de que estamos decididos a sacar la educación del enfrentamiento político y de que tenemos la intención de alcanzar un pacto de estado que redunde en beneficio de todos.
Por primera vez en democracia, existe la posibilidad de llegar a un verdadero acuerdo en materia educativa. Un acuerdo ambicioso, un acuerdo al margen de intereses particulares, de desconfianzas, de personalismos. De ese politiqueo que se está cargando la escuela pública. Que está condicionando el porvenir de nuestros niños, de nuestros jóvenes, de las familias. El mañana de todos.
Hace semanas, Ciudadanos impulsó en el Congreso constituir una comisión por el pacto educativo que fue aprobada por mayoría y que puede servir de germen para ese gran acuerdo. Lleva usted razón cuando dice que es posible poner las primeras piedras de un edificio que sólo puede levantarse con la voluntad de unos y otros. No tiene sentido esperar la formación de gobierno si estamos de acuerdo en lo esencial. Y además, comprometernos a trazar esa hoja de ruta para un acuerdo educativo es un modo de demostrar a la gente que sus representantes son capaces de aparcar viejas querellas para trabajar por algo más grande que las siglas, los líderes o nuestras ideologías.
Si nos sentamos ya en torno a una mesa para dibujar el mapa del pacto por la educación, estaremos lanzando un mensaje a esa ciudadanía legítimamente enfadada con sus representantes.
Profesor Marina, quiero que entienda este texto como lo que es: un compromiso firme. Estamos dispuestos a empezar a estudiar ese pacto mañana mismo. Puede contar con Ciudadanos, y se lo digo después de que mi partido me autorice a hacerlo. Aguardamos esperanzados la respuesta de PSOE, PP y Podemos para iniciar cuanto antes un camino común en dirección al futuro.