Con más del 90% de los votos escrutados, todo parece indicar que el el economista de centro derecha Pedro Pablo Kuczynski (PPK) será el nuevo presidente de Perú. Una vez más, Keiko Fujimori vuelve a caer en la segunda vuelta de las elecciones, como ya ocurrió en 2011 frente al ex oficial del ejército Ollanta Humala. El desgaste de la candidata del partido Fuerza Popular ha tenido lugar principalmente en la semana previa a las votaciones, después de que en el último debate electoral Kuczynski le acusara de vínculos con el narcotráfico. Otro punto de inflexión ha sido la revelación de que la DEA (la agencia antidrogas estadounidense) estaba investigando al secretario general de Fuerza Popular por lavado de dinero.
Estos escándalos, al igual que el miedo de muchos votantes a que la presidencia de Fujimori signifique un retorno al autoritarismo de su padre, han hecho mella en la popularidad de la candidata. A pesar de que Fuerza Popular ganó la primera vuelta de abril con un 40% de los votos y por lo tanto tendrá mayoría en el próximo Congreso, Kuczynski ha conseguido aglutinar el apoyo de los antifujimoristas tanto en la derecha como en la izquierda.
Que el candidato del PPK vaya a ser con toda probabilidad el nuevo presidente de Perú es una buena noticia. Ex banquero de Wall Street y ex funcionario del Banco Mundial, ya fue primer ministro en 2005 y cuenta con la confianza del sector empresarial. A todas luces, parece el candidato más indicado para seguir llevando a cabo las reformas económicas y sociales que necesita el país.