El PP ha registrado una enmienda en el Senado a la reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial -que aprobará gracias a su mayoría absoluta en esta Cámara- en la que plantea la total despolitización de la Justicia. Los populares proponen que los candidatos al CGPJ sean elegidos por los jueces y en listas abiertas.
Este paso supone un cambio radical respecto de la posición que el PP ha venido manteniendo en la práctica. Aunque llevó en su programa electoral la promesa de dejar en manos de los jueces la elección de la mayoría de los vocales del CGPJ, ni cuando tuvo mayorías absolutas introdujo ese cambio.
Cambio de criterio
Con la enmienda que ahora plantea el PP a la ley socialista de 1985, que es la que rige hoy día, Pablo Casado une su voz a la de Albert Rivera, e incluso da un paso más allá al garantizar que las asociaciones judiciales no podrán mediatizar el proceso.
Ha tenido que renunciar a presidir el CGPJ y el Tribunal Supremo un juez del prestigio de Manuel Marchena para que el PP cambie de criterio. En el programa electoral de 2015 sólo hablaba de la "independencia de la Justicia", de forma abstracta. Únicamente tras el pacto de investidura con Cs en 2016 -que permitió la investidura de Rajoy- los populares se comprometieron a que los vocales de procedencia judicial fueran elegidos por los propios magistrados, aunque luego aparcaron el asunto.
No a las injerencias
Hay que aplaudir, en cualquier caso, que el PP vuelva a la razón. Cuando la Ley del Poder Judicial ya enmendada recale en el Congreso, quien estará entre la espada y la pared será Pedro Sánchez: el bloque de centroderecha suma 169 escaños y sólo se necesitaría llegar a 176 para sacar adelante la despolitización del CGPJ. Y más en un momento en el que la sociedad clama contra la injerencia de los políticos en la labor de la Justicia.