1. Ximo Puig (presidente de la comunidad autónoma valenciana)
"Todo el mundo tiene derecho a convocar manifestaciones, pero la manifestación de Colón es absolutamente impresentable" dijo Ximo Puig (PSPV) el jueves y algunos recordamos aquella vieja máxima que dice que todo lo que precede a un 'pero' es mentira. Porque lo que en realidad quería decir el pancatalanista Puig es que todo el mundo tiene derecho a convocar manifestaciones… siempre y cuando sea de izquierdas.
2. Alberto Garzón (coordinador federal de IU)
Cada vez que Alberto Garzón, el de "me fui de luna de miel a Nueva Zelanda como cualquier otro español", dice eso de "las tres derechas" me vienen a la cabeza las doscientas treinta y ocho izquierdas de este país. Todas ellas, sin excepción, aliadas de la ultraderecha nacionalista catalana.
3. Aitor Esteban (portavoz del PNV en el Congreso de los Diputados)
Que el PNV votara a favor de la moción de censura presentada por Pedro Sánchez una semana después de aprobar los Presupuestos Generales de Mariano Rajoy es sólo una traición más en el historial de un partido cuya lealtad a la Constitución se mide en euros y que sería capaz de aliarse con los invasores alienígenas si estos les prometieran a los vascos un par de collares de latón. Pero que le intenten enchufar la responsabilidad del desastre a PP y Ciudadanos es de aurora boreal: Pedro Sánchez es su criatura y deberían hacerse cargo de él los que amamantaron su narcisismo.
4. Carmen Calvo (vicepresidenta del Gobierno)
"El diálogo con la Generalidad ha encallado porque planteaban un referéndum de autodeterminación que no es aceptable" dijo Carmen Calvo (PSOE) el pasado viernes. Es difícil no empatizar con ella. ¿Quién podía imaginar que ese separatismo catalán que ha declarado la independencia por dos veces y cuyos líderes están a punto de ser juzgados como responsables de un golpe de Estado pretendiera exigir un referéndum de independencia? ¡Era impensable!
5. Gorka Otxoa (actor)
A Gorka Otxoa se le está poniendo cara de Lexatin. Y lo que le queda hasta mayo, pobre.
6. Andoni Ortuzar (presidente del EBB del PNV)
"Que nadie nos espere en Colón" dice el que se fotografió brindando con Arnaldo Otegi. Que no se preocupe: nadie le esperaba. Ni a él ni a su amigo.
7. Andreu Buenafuente (presentador y productor de TV)
"¿De verdad vamos a manifestarnos porque alguien quería dialogar?" dijo Andreu Buenafuente el jueves por la noche. Luego calificó a Albert Rivera y Pablo Casado de "fachas", y Churchill, Spinoza y Clausewitz se revolvieron en sus tumbas abrumados por la onda expansiva del profundo análisis político del presentador catalán.
8. Gabriel Rufián (portavoz de ERC en el Congreso de los Diputados)
En las manifestaciones organizadas por el separatismo catalán no resulta difícil ver a terroristas en la cabecera de la marcha o al mismo presidente de la Generalidad saludándoles cariñosamente, pero ojo con la posibilidad de que dos docenas de ultras a los que nadie ha invitado aparezcan a ochocientos metros de Albert Rivera, Pablo Casado y Santiago Abascal porque eso demostrará la evidente simpatía entre los unos y los otros. En otro orden de cosas, Falange, JONS y España 2000 son pura socialdemocracia comparados con la ultraderecha nacionalista de ERC, CUP y JxCAT, pero ese es tema para otro artículo.
9. Jordi Sevilla (presidente de Red Eléctrica)
Según Jordi Sevilla, los "adversarios" de Pedro Sánchez pretenden conducirnos hasta "un enfrentamiento civil". Pero Sevilla no se refiere, como podría parecer, a los nacionalistas catalanes que están a punto de ser juzgados en el Tribunal Supremo como responsables de un golpe de Estado, sino a los que piden que Pedro Sánchez cumpla su promesa de convocar elecciones generales. El concepto de la democracia que tiene el socialismo español siempre ha sido un poco ventajista. Pero en algunos casos, como el de Jordi Sevilla, bordea lo kafkiano.
10. José Zaragoza (diputado del PSC en el Congreso de los Diputados)
José Zaragoza es un arquetipo. El tuit fijado en su cuenta de Twitter hace referencia a Franco. Divide a la sociedad en "ricos" y "pobres". Afirma que los que están en contra de la Ley de Violencia de Género niegan la existencia de la violencia contra las mujeres. Tuitea imágenes de la serie de TV El cuento de la criada para hablar de la ley del aborto. Habla a todas horas de "diálogo", pero no con PP, Cs o Vox, sino con los nacionalistas catalanes que han quebrado la convivencia en la región para varias generaciones. Manipula las palabras de la senadora Ester Muñoz (PP) para hacerle decir a esta lo que no dijo y es capaz de juntar "los Principios Fundamentales del Movimiento" y "Pablo Casado" en la misma frase sin ruborizarse. José Zaragoza, en fin, es puro PSC. Es decir, puro nacionalismo catalán.
11. Ernest Urtasun (candidato de Catalunya en Comú Podem en las elecciones europeas de mayo)
La manifestación de hoy no es transversal porque en las elecciones generales que se reclaman en la plaza de Colón sólo votarán, obviamente, los votantes de derechas. El argumento chirría aún más cuando se recuerda que ha sido el partido de Ernest Urtasun el principal defensor de la idea de que el nacionalismo catalán "sólo quería votar". ¿Por qué el "querer votar" de los separatistas catalanes, que implica el aplastamiento de los derechos de millones de ciudadanos españoles, es legítimo, pero el deseo de votar de PP, Cs y Vox es ilegítimo, sectario y peligroso para la democracia?
12. Pedro Sánchez (presidente del Gobierno)
No hay nada que tema más Pedro Sánchez que verse obligado a hacer aquello que él mismo prometió hacer hace ya ocho meses: convocar elecciones generales. Le va el Falcon en ello.