El baile electrocutado de María Jesús Montero en Ferraz creyendo que Sánchez se iba de verdad fue la imagen que resumió la angustia de esos miles de fieles que salieron a la calle con el paraguas y el bocadillo para pedir a su líder que se quedara. Ninguno sabía –ni los ministros ni los afiliados del último pueblo de España– que eran actores secundarios de una obra de teatro.
Lo increíble de todo esto, dicen las portadas de esta mañana, es que, en cinco días, Sánchez ha pasado de amagar con irse a laminar cualquier debate sobre su sucesión. Es decir: Sánchez no solo no pensaba irse, sino que ya estaba pensando en repetir como candidato a las próximas generales. Y no lo dice un pseudomedio. El País: “Sánchez trata de cortar en seco el debate sobre su sucesión. El presidente se postula para la reelección”.
ABC: “El líder socialista zanja el debate sobre su sucesión”. La Razón: “Sánchez, de amagar con irse a cerrar el debate sucesorio. Dice que tiene ánimo para estos tres años y los que los españoles quieran”. Dentro de tres años, añado, Sánchez habrá superado la marca de Rajoy, Zapatero y Aznar. Sólo le quedarían los casi 14 años de González. Sánchez, me temo, compañeros, quiere jubilaros a todos. Pero puedo prometer y prometo que nunca jamás permitiré que os exhume.
La novedad más importante sobre esto no está en las noticias, sino en un editorial. El de El País. Curiosamente, mientras el presidente ordena zanjar cualquier discusión sobre quién le precederá, El País anima a lo contrario, a abrir ese debate. Dice el texto que al PSOE se le han visto estos días “las costuras”, que quien va por libre es laminado, que es Sánchez quien ha alimentado el debate sobre la sucesión y que el partido debe reflexionar ya de manera colectiva cómo garantizar la continuidad del proyecto sin su actual líder.
Recomiendo un artículo muy divertido de Carlos Prieto en El Confidencial sobre este asunto. Como en España, Sánchez ya sólo puede ser considerado o el “último bastión de la democracia” o “un tirano caribeño descontrolado”, el periodista ha acudido a la mirada desapasionada de los corresponsales extranjeros, que dicen lo siguiente. Mathiue de Taillac (Le Figaro): “España ha estado cinco días esperando la respuesta de Sánchez a una pregunta que nadie le había hecho, que se había hecho él mismo. Nadie lo entiende. Ni siquiera estoy seguro de que Sánchez entienda lo que ha hecho Sánchez”. Martín Dahms (Frankfurter Rundschau): “Un teatro digno de un pequeño Trump”. Graham Keeley (The Independent): “Si quiere defender a su mujer de unas acusaciones falsas, ¿para qué dimitir?”.
Y una encuesta en EL ESPAÑOL sobre la gran broma final: “El 71% cree que Sánchez nunca pensó en dimitir y que actuó movido por estrategia política. El 73% de los españoles está en contra de limitar las actuaciones de los jueces y el 71% en contra de tomar medidas contra los medios”.
Continúa esa discusión pública sobre qué va a hacer Sánchez a partir de ahora, sobre qué significa ese “punto y aparte” que anunció en su discurso. El Mundo: “El PSOE se lanza a señalar a los pseudomedios que liga al PP e inicia una ofensiva para reclamar en los parlamentos autonómicos información sobre el reparto de la publicidad institucional”.
Expliquemos esto: el Gobierno central y los gobiernos autonómicos se anuncian en los periódicos con esa publicidad institucional, que supone una parte de los ingresos de estos periódicos. Por tanto, como cualquier financiador, estos gobiernos buscan influir en la línea de estos periódicos. El Gobierno está retando al PP a poner sobre la mesa todas las inversiones en publicidad institucional.
El Confidencial: “La reforma en la transparencia de medios que exige Sánchez ya existe y se aplicará este año. La Unión Europea publicará en las próximas semanas un reglamento que obliga a los medios a informar a la audiencia de la financiación pública que reciben”.
El otro frente es el judicial. Qué hará Sánchez con el CGPJ. EL ESPAÑOL: “Los socios a la izquierda de Sánchez le presionan para cambiar el CGPJ sin el PP”. La Vanguardia: “Sánchez reabre la puerta a renovar el CGPJ sin el PP”. La Razón: “Sánchez se pliega a renovar el CGPJ sin pactarlo con el PP”.
Todo esto enraiza en las informaciones publicadas sobre Begoña Gómez. Portada de El Mundo: “El PP propone al PSOE regular la figura del cónyuge del presidente”. Mientras tanto, seguimos acercándonos a las elecciones en Cataluña. Como no se nos ha olvidado que estaban ahí, recomiendo para reconectar un reportaje de Peláez en ABC, enviado a un mitin de la CUP. Nos recuerda, desde un teatro llamado “Los carlistas”, que “hay que hacer comarca”, como decía Frodo Bolsón en El Señor de los Anillos.
*Esta es la revista de prensa que Daniel Ramírez realiza cada mañana para 'La España que madruga', en 'Más de Uno', el programa de Carlos Alsina en Onda Cero.