"La causa invocada para el cese del coronel es ajena a su inidoneidad para el cargo", dice el Supremo en una dura sentencia por la actuacion de Marlaska.
Los presuntos autores, algunos de ellos de Hellín (Albacete), Seseña (Toledo) y Guadalajara, atacaron telemáticamente a 100 compañías altamente solventes.
La Audiencia Provincial le condena como inductor de los delitos de revelación de secretos y violación de secretos oficiales. También, por cohecho activo.
Juan Carlos Martínez compró una de estas viviendas a través de su consultora, que recibió fondos de la Agencia que repartía las ayudas ilegales de los ERE.