• La embajada española trabaja en aclarar la muerte del coruñés Diego Bello

Se cumplió la previsión. Ayer avanzábamos que el cuerpo de Diego Bello, el joven coruñés abatido a tiros en Filipinas, llegaría en la jornada de hoy, martes, a la ciudad que lo vio nacer, A Coruña. Y así fue.

El cadáver de Bello llegó a la ciudad herculina, según informan varios medios locales, después de que fuera repatriado la semana pasada y de que ayer se le realizara una autopsia en el Instituto Anatómico Forense. 

El velatorio, según estas mismos medios de comunicación, tiene lugar en el Tanatorio Albia, en Agrela. El entierro será mañana.

La investigación sobre la muerte de este joven afincado en Filipinas sigue abierta. La embajada española trabaja en esclarecer este suceso que conmocionó a la ciudad coruñesa. Por su parte, los allegados de Bello esperan que el resultado de la segunda autopsia encargada por un juez de la Audiencia Nacional arroje un poco de luz a lo sucedido.

Tras su llegada a Madrid el sábado desde Filipinas, una vez realizados todos los trámites para la repatriación del cuerpo a España, en la capital española se le realizó este lunes una segunda autopsia, a instancias de un juez de la Audiencia Nacional, que ha asumido la investigación tras la denuncia presentada por la familia.

Esta segunda autopsia, que pretende esclarecer las circunstancias de su muerte, se suma a la primera que se le realizó ya en Filipinas, bajo supervisión de la Comisión de Derechos Humanos de ese país.

Hechos

La muerte de Diego Bello se produjo en una operación en su domicilio en la localidad de General Luna, en Siargao. La Policía, que lo consideraba sospechoso de tráfico de cocaína, lo mató en un tiroteo registrado en el sur del archipiélago filipino, según informó el diario digital local Minda News.

Sin embargo, tras conocerse la noticia, desde su entorno, tanto su familia como amigos, han defendido que "en ninguno de los países en los que residió" –en Filipinas tenía varios negocios– estuvo involucrado "en incidente alguno".

"Y menos con el tráfico de estupefacientes o tenencia de armas", ha defendido la familia que, tras la llegada del cuerpo a España, han recalcado que "ahora empieza la segunda parte, la búsqueda de justicia".

Entierro en Pastoriza

El joven coruñés será enterrado este miércoles, por la tarde, en el cementerio parroquial de Pastoriza, en Arteixo (A Coruña), según han confirmado a Europa Press desde el entorno familiar.