Pancartas negras en el CEIP Ramón de la Sagra coruñés por el Día Universal del Niño
Familias y docentes reivindican peticiones para el centro que llevan realizando semanas a la Consellería de Educación y demandan que "las administraciones se sienten a organizar"
20 noviembre, 2020 14:46El CEIP Ramón de la Sagra de A Coruña celebra hoy el Día Universal del Niño con una iniciativa que llenará de pancartas negras el centro en las que los más pequeños han reivindicado sus derechos y han hecho hincapié en las mejoras que llevas solicitando semanas en el ámbito educativo. Además, se ha leído un manifiesto y los niños hicieron una performance con una canción inspirada en los Derechos Humanos.
Desde el pasado 6 de octubre tanto familias como docentes llevan realizando todos los viernes a las 14:00 horas lo que denominan "Viernes negro", una acción con la que quieren llamar la atención de la Consellería de Educación sobre las necesidades de los alumnos en esta complicada situación de pandemia. Entre las principales denuncias, que han sido remitidas hace semanas a la Xunta por 140 familias sobre el que los padres confirman que no han obtenido respuesta, destacan que "hay un baño para 150 niños, no se ha reducido el ratio de un profesor por cada 25 niños y que se han reducido docentes de la plantilla", sobre lo que matizan que un profesor se comparte con otro centro.
Una de las principales impulsoras de este movimiento ha sido una de las madres, Lucía, que sostiene que "parece que el covid lo justifica todo" a la vez que hace hincapié en que "no se hizo previsión de los espacios del centro aunque el estado de alarma se decretó el pasado 13 de marzo". En este sentido critica que en el colegio coruñés "los niños no tengan un espacio cubierto exterior para realizar gimnasia", un inconveniente que cuando llueve "les deja sin clase de educación física y tienen que realizar la actividad en el aula".
"Sabemos que esta situación no es fácil pero es cuestión de poner dinero donde hay que ponerlo y desde marzo nadie se ha sentado a escuchar a los niños cuyos derechos ahora mismo están comprometidos", explica, al mismo tiempo que destaca que "los profesores hacen magia aunque no tienen medios" y los califica como "una víctima más de esta situación". Además, la madre recuerda que en Elviña, la zona donde se ubica el centro, "hay muchas instalaciones municipales", por lo que solicita a las administraciones que se sienten para intentar gestionar su uso por parte del centro. "No nos escuchan ni se atienden las necesidades básicas de los niños", concluye.