El Concello de A Coruña asume el derribo del edificio de San Roque, en el Paseo Marítimo

Parece no haber alternativa. El edificio de San Roque de Afuera, en pleno Paseo Marítimo de A Coruña, tendrá que ser demolido, tal y como establece la sentencia. Los vecinos de este inmueble piden evitar su derrumbe, también el Concello intentó que la demolición del inmueble fuese parcial, pero el juzgado ha desestimado esta petición municipal y obliga a su derribo total.

El Concello, según informan fuentes municipales, se limitará a dar cumplimiento a aquellos pasos que le indica el juzgado a raíz de la sentencia. Y aunque han buscado medios para evitar este final, la alcaldesa ya avanzó que se procederá a su demolición: "No encontramos ninguna vía que no sea iniciar ese proyecto de demolición y proceder al cumplimiento estricto de la legalidad".

Al no encontrar otras vías, el Concello tendrá que cumplir con la sentencia que obliga a demoler un edificio cuyos vecinos deberán recibir una compensación por parte del consistorio herculino, ya que el edificio se construyó con un licencia municipal que vulneraba el Plan General de Ordenación Municipal (PGOM).

Un asunto que se remonta al año 2002

La polémica que rodea a este edificio se remonta ya al año 2002, cuando el pleno municipal concedió una licencia de reforma, con la que se duplicó la superficie construida. En 2008 este incumplimiento fue denunciado por una vecina y la Justicia solicitó al Concello anular la licencia, que más tarde sería refrendada por los juzgados, pero sin mencionar la demolición del edificio.

Unos cinco años más tarde, el juzgado dictaminó el derribo total del edificio y no solo de aquellos elementos que eran considerados ilegales por incumplir la normativa urbanística. En dicha sentencia, se considera que la edificación como tal queda desautorizada al haber sido anulada la licencia. En 2019, el Concello presentó un recurso solicitando que la demolición fuese parcial, eliminado aquellos elementos que serían ilegales. Sin embargo, la Justicia lo ha desestimado y ahora obliga a la demolición total del inmueble. Lo único que se podría salvar sería la parte del sótano, el resto se tendrá que tirar abajo.