Este miércoles la mascarilla se retirará en espacios interiores, un hecho relevante que hace que la sociedad camine hacia la normalidad real. Una que ya parece que vive el sector turístico en la ciudad de A Coruña, que ha firmado una Semana Santa con unos datos de ocupación mejor de lo esperados.

"Desde nuestra asociación estamos contentos con el resultado obtenido durante la Semana Santa ya que rondamos el 85% de ocupación, por encima incluso de lo que estimábamos hace una semana, gracias al fuerte volumen de reservas de los últimos días", explica a Quincemil Agustín Collazos Martín, director del Finisterre y presidente de Asociación empresarial de hospedaje de A Coruña (Hospeco). Este dato es un poco superior a la media gallega, que se ha situado en el 80%.

Las calles de la ciudad de A Coruña se llenaron durante los días festivos y el fin de semana de turistas, que disfrutaron además de una buena climatología. Desde Hospeco, explican que el cliente principal ha sido nacional, incluso regional con trasvase de gente de sur a norte y con las comunidades limítrofes como principales generadores de reservas, "sin olvidarnos claro está de Madrid que suele tener un funcionamiento muy bueno en estas fiestas un poquito más largas", explica Agustín. Además, el presidente apunta que la celebración de la Golden Cup de Hockey ha hecho que muchos aficionados portugueses hayan venido a la ciudad y hayan podido disfrutar turísticamente de la misma.

El sector del turismo mira con optimismo al verano

Estos buenos datos de ocupación se han acercado bastante a niveles prepandemia. Además, se han conseguido en una situación dónde el alza de precios está provocando que las familias pierdan nivel adquisitivo. "Todo ello a pesar que las dificultades que están surgiendo en la economía de las familias con los incrementos de IPC, de carburantes, guerras", cuenta el hotelero. Quizá esta situación es la que explica otra tendencia que está viviendo el sector del turismo, en la que el cliente toma la decisión de viajar con muy poca antelación.

Sobre cómo será el verano, el presidente de Hospeco confiesa que son optimistas, pero tampoco quieren serlo demasiado, sobre todo, por la situación económica actual, que es muy cambiante. "Esperemos que todo se vaya resolviendo y que se vaya despejando el camino para tener un verano de normalidad".

"La Semana Santa ha sido un buen termómetro para comprobar las ganas que tenemos todas las familias de viajar y sin duda que esperamos que en el verano esas ganas de viajar y vuelta a nuestra normalidad nos permita obtener unos resultados muy positivos", añade .