Sancionadas firmas lácteas por irregularidades en la recogida en Galicia, según Agromuralla

ACTUALIZACIÓN (21:59 horas): El Grupo Leche Río ha hecho público un comunicado en el que desmiente la información remitida por la Asociación Agromuralla y asegura que la empresa no ha sido sancionada porque los contratos no incluyan la información mínima que es obligatoria de acuerdo con la Ley de cadena alimentaria, sino por no haber facilitado la documentación requerida por el AICA en el tiempo requerido para ello, por un mero error administrativo. La firma asegura que, en cualquier caso, la sanción impuesta por "incumplir la obligación de suministrar la información que se le sea requerida por la autoridad competente en el ejercicio de sus funciones” ha sido recurrida por entender que se trata de un error administrativo, sin culpa ni dolo, por lo que no debe acarrear una sanción. El recurso se tramita ante el Juzgado Central de lo Contencioso Administrativo estando pendiente la celebración de la vista en el próximo mes de mayo.

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LUGO, 18 Abr. (EUROPA PRESS) –

Agromuralla informa de que la Agencia de Información y Control Alimentario (AICA) ha sancionado a tres empresas lácteas (Lactalis, Leche Río y Celega) por irregularidades en contratos de recogida en Galicia. Según informa esta asociación de ganaderos en un comunicado, las actuaciones de la AICA partieron de una denuncia de Agromuralla en 2020, de forma que "los incumplimientos se refieren a la cláusula de los costes de producción y a haber realizado modificaciones en el precio pactado".

En concreto, la Agencia de Control Alimentario da la razón a Agromuralla en lo tocante a que los contratos "no incluyen los extremos que, como mínimo, deben contener los contratos alimentarios" respecto al precepto 23.1.b) de la Ley de la Cadena Alimentaria. En el caso de Celega, además, "la infracción tiene que ver con realizar modificaciones en el precio incluido en el contrato que no estén expresamente pactadas por las partes".

Al respecto, Agromuralla muestra su satisfacción, pero emplaza a la agencia a que actúe de oficio en defensa de los productores, sin que sean los propios ganaderos los que se vean obligados a denunciar, "teniendo que enfrentarse a las empresas que les recogen la leche". Además, avisa de que se mantendrá "vigilante" y llevará a la AICA todas las posibles situaciones que "vulneren la normativa". "No vamos a tolerar ningún abuso por parte de las industrias", deja claro.