Movilización de la CIG en A Coruña por el mantenimiento del poder adquisitivo en la banca
Las protestas tendrán continuidad en los próximos meses y este jueves hubo concentraciones delante de sucursales de Abanca, Banco Santander, Banco Sabadell, CaixaBank, Bankinter y BBVA
28 abril, 2022 17:02Delegadas y delegados de la CIG en el sector financiero desarrollaron una jornada de movilizaciones este jueves en A Coruña en protesta por "la situación insostenible creada a causa de la brutal reducción de personal mediante los distintos ERE; la no actualización de los salarios y la pérdida de poder adquisitivo tras años de congelación y subidas irrisorias". Esta protesta sirvió también para denunciar la "falsa campaña de preocupación por la clientela puesta en marcha por las entidades bancarias para lavar su imagen mientras continúan subiéndole las comisiones y recortando los servicios", exponen desde el sindicato.
Esta primera jornada de movilizaciones, que tendrá continuidad en los próximos meses, incluyó concentraciones delante de sucursales de Abanca, Banco Santander, Banco Sabadell, CaixaBank, Bankinter y BBVA y finalizó delante del edificio de la Delegación del Gobierno en A Coruña. En el contexto de precarización laboral y pérdida de empleo sufrida en el sector en la última década, la representación de la CIG denuncia que "el personal de los bancos y de las antiguas cajas de ahorro lleva años con sus salarios congelados, mientras la carestía de la vida continúa en crecimiento imparable".
"Aunque las entidades obtienen beneficios millonarios, nuestras condiciones empeoran, hay menos personal en oficina y nuestros salarios están cada vez más recortados", advirtieron Clodo Montero y Miguel Fernández, representantes de la CIG en la mesas del convenio de Ahorro y de Banca, respectivamente.
"Menos salario y más objetivos y presiones"
Desde la CIG, subrayan que "en 2021 el IPC se situó en el 6,5% y que en el mes de marzo, a nivel gallego, ya superó el 10%, por lo que la pérdida de la capacidad adquisitiva de los trabajadores y de las trabajadoras es brutal". Fernández explica que, aunque estos convenios estatales siempre estuvieron marcados por los recortes salariales, "este deterioro se vio incrementado por las miserables subidas pactadas y la renuncia de los sindicatos firmantes a mantener la cláusula de revisión automática".
En este contexto, apunta que "a cambio aceptaron introducir una cláusula de participación en beneficios pero que no se cobran en ningún momento, a pesar de que los bancos cada día tienen mayores beneficios y las direcciones perciben retribuciones indecentes". Montero subraya a su vez que también están congeladas las compensaciones variables que, además, "con los objetivos que nos marcan las entidades son imposibles de cobrar".
A esto se añade que las nuevas contrataciones que se hacen en el sector son en precario, a tiempo parcial y con salarios de 800 euros. Por el contrario, exponen que "sí que nos aumentan los objetivos comerciales y nos meten una presión tremenda para colocar productos financieros que la clientela no demanda. Incluso tenemos objetivos por productos complejos que entendemos que la normativa europea prohíbe".
"No pueden subir los objetivos, reducir personal, aplicar un ERE tras de otro y recortarnos el salarios mientras a la clientela le suben las comisiones directas e indirectas y se le restringen los servicios", critica Montero. En esta línea, Miguel Fernández apunta que incluso hay entidades que le cobran una comisión a clientela por retirar dinero en la caja de su propia cuenta.
Esta política de los bancos, señala, provoca además un enorme malestar entre las clientas y los clientes "cuyas consecuencias somos los trabajadores y las trabajadoras quien tiene que pagar".
Negativa de la patronal a la propuesta de la CIG
Para revertir el recorte de los salarios, la CIG le trasladó una propuesta a la patronal para negociar un incremento de los sueldos, "pero denegaron negociar porque dicen que tienen los convenios cerrados", cuentan miembros del sindicato. La CIG también reclamó a nivel de empresas una actualización de los complementos para intentar minimizar la pérdida del poder adquisitivo, pero la respuesta también fue negativa.
"Lo que estamos reivindicando es que los bancos nos suban los salarios de igual manera que nos aumentan la carga de trabajo y los objetivos. Por eso seguiremos con las movilizaciones de delegados, en el camino de hacer una gran movilización de trabajadores", concluyeron.