El comité de Albada hará uso del escaño de ciudadanía en el Pleno municipal que tendrá lugar el próximo jueves 5 de abril para demandarle al Gobierno de A Coruña que aclare qué planes de futuro tiene para la planta de Nostián, que concrete en que estado se encuentran los pliegos de la nueva concesión y si estos incluirán los acuerdos laborales alcanzados con el anterior Gobierno.

La representación del personal explica que con esta intervención en el Pleno se inicia un nuevo calendario de actuaciones ante la falta de soluciones al deterioro continuado de la planta y la pérdida constante de derechos sociolaborales, en el que no descartan la convocatoria de huelga.

"Dramática y angustiosa"; fueron los dos adjetivos utilizados por Hadrián Canosa, presidente del comité de Albada, para definir la situación en la que se encuentran los alrededor de 120 trabajadores y trabajadoras de la planta de tratamiento de residuos de Nostián.

Canosa recordó que el anterior Gobierno municipal tenía prácticamente finalizados los pliegos y en este contexto, comité y Concello firmaron un acuerdo de garantías laborales que incluye, entre otras cuestiones, el mantenimiento de las condiciones de trabajo y salariales según el convenio (ahora decaído), mantenimiento de los niveles de empleo, más estabilidad para lo personal eventual o reconocer el derecho de subrogación, también para el personal de las contratas.

El sindicato explica que con el cambio de gobierno tras de las elecciones municipales, la actual concejal de Medio Ambiente se comprometió a sacar los pliegos antes del final de la concesión, el 31 de diciembre de 2019. Sin embargo, a día de hoy los pliegos siguen sin publicarse y el comité a la espera de ser recibido por Esther Fontán, después de que en mayo del año pasado se hubiera retrasado la reunión que tenían concretada.

Incumplimientos de la empresa

A este respeto, el comité denuncia la permisividad con Albada, que está gestionando la planta en situación de prórroga forzosa después de un período de ocho meses de intervención municipal, sin que el Gobierno del PSOE le exija hacer las reparaciones y el mantenimiento adecuado.

Así, Canosa explicó que la limpieza de las instalaciones es muy deficiente; que la tarjeta y el plástico van a parar a la escombrera por la falta de personal; que la planificación anual preventiva que hace la empresa está enfocada a la nueva concesión, en una clara vulneración de la ley de prevención; o que hay un biodixestor paralizado desde hace año y medio por una avería que sigue sin ser reparada.

A esto se suma el incumplimiento de la sentencia del TSXG que le ordena la Albada sellar la escombrera, que genera residuos que van a parar al mar sin que el Ayuntamiento le exija la empresa acometer de inmediato esta obra. La falta de sellado, matizó Canosa, derivó en la imposición de multas por parte de la Xunta de Galicia que ascienden a los 80.000 euros. "Este motivo por si só debera ser máis que suficiente, non para sacar uns novos pregos de condicións, senón  para quitarlle directamente a concesión a esta empresa", afirmó el presidente del comité.

En el plano laboral, la representación social subrayó que los trabajadores y trabajadoras tienen los salarios congelados desde el año 2013 y están sin convenio desde lo 31 de diciembre de 2019, sin intenciones por parte de la empresa de avanzar en las negociaciones. "A actitude de Albada co seu persoal é a de demostrar o seu máis absoluto desprezo por quen estivo durante todos estes anos xerándolle riqueza, eliminando todos e cada un dos dereitos conquistados até o momento, mesmo aqueles que foran recoñecidos en sede xudicial", dijo Canosa.

La empresa culpable, el Concello cómplice

Canosa culpó de este destrozo a la empresa, pero extendió las responsabilidades al Ayuntamiento "por deixar pasar todos estes anos sin darlle unha solución". Por eso, le demanda al Gobierno que aclara que previsiones tiene para la planta de Nostián y para su personal y si ha previsto remunicipalizar el servicio.

Una demanda que el comité lleva tiempo haciéndole al Concello ante los reiterados incumplimientos de los pliegos, pues en 20 años de concesión, Albada fue incapaz de alcanzar las cuotas de reciclaje exigidas, "o que confirma que a xestión privada non mellora nada, se acaso empeora a xestión pública, e non mostra a menor sensibilidade, nin polos seus traballadores e traballadoras, nin polo medio ambiente".

En este punto, Hadrián Canosa llamó la atención sobre lo hecho de que "os cartos cos que se financia a empresa son públicos, son dos veciños e das veciñas e estanse pondo en mans privadas, en mans de especuladores que non teñen como obxectivo reciclar mellor, senón gañar cada vez máis cartos". Alertó, "mentres a todos e todas nos soben o recibo da luz de xeito desorbitado, esta empresa, que se financia cos nosos cartos, está a facerse de ouro aproveitando a especulación da electricidade, porque na planta de Nostián xérase electricidade co metano que se forma coa materia orgánica".

Por todos estos motivos, el presidente del comité insistió en demandar agilidad en la publicación de los pliegos, o que el Concello de A Coruña se haga cargo del personal a través de la remunicipalización del servicio, para evitar que la planta se siga deteriorando y que Albada continúe recortando los derechos de los trabajadores y de las trabajadoras.