Abusos sexuales, mujer.

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La víctima de la agresión sexual en A Coruña en 2020, con síntomas "compatibles" a la denuncia

Los hechos se produjeron en el paseo fluvial de A Barcala y la víctima conoció al hombre a través de una red social

3 mayo, 2022 13:59

A CORUÑA, 3 May. (EUROPA PRESS) –

Una médica forense ha afirmado que la víctima de una presunta agresión sexual, cometida en agosto de 2020 en Cambre (A Coruña) por un hombre que había conocido en una red social, presenta "síntomas perfectamente compatibles con los hechos denunciados". Así lo ha manifestado durante el juicio celebrado este martes en la sección segunda de la Audiencia Provincial de A Coruña.

La facultativa ha explicado que previamente a los acontecimientos la mujer presentaba un "trastorno ansioso depresivo del que estaba siendo tratada y del que consta una evolución favorable". Tras el suceso denunciado, según ha explicado la doctora, "su estado previo ha aumentado considerablemente", produciéndose una "agravación de la sintomatología clínica" con necesidad de aumento en la dosis de medicación y de las sesiones de psicoterapia.

Al ser preguntada por el Ministerio Fiscal sobre la posibilidad de que el trastorno inicial de la mujer pudiese dar lugar a "fabulación" en su descripción de los hechos, la médica forense ha descartado la presencia de "contenido delirante que pudiese distorsionar la percepción de la realidad de la víctima". En este sentido, el psicólogo que ha comparecido en la sala ha corroborado esta circunstancia en su declaración. "No tengo ninguna indicación de que fabule", ha señalado y ha afirmado que tras el suceso su paciente presenta "sintomatología depresiva" como ansiedad, problemas para relacionarse y trastornos en la alimentación y el sueño.

Hechos acreditados "sin género de dudas"

Por su parte, el Ministerio Fiscal en sus conclusiones ha manifestado que los hechos denunciados "quedan acreditados sin ningún género de dudas". "Existe una revocación clara y expresa del consentimiento inicial", ha incidido y "no hay móvil de venganza" por parte de la víctima.

En este sentido, el abogado de la defensa en declaraciones a Europa Press ha argumentado que la acusación "solamente se basa en indicios. No tiene pruebas objetivas", en referencia a que los informes médicos no prueban "hematomas, lesiones o fisuras" que son el "elemento primigenio" de una agresión sexual. En consecuencia, el letrado ha pedido "la absolución" de su cliente y ha insistido en que fue una relación "querida, amorosa y bonita". "En ningún momento existió violencia ni intimidación, es lo que dicen los médicos", ha apostillado.

Al final de la vista, el acusado ha añadido: "Soy inocente. Escucho los años de condena y veo como la juventud mía se puede dañar porque ella dice eso que es una mentira".

Hechos ocurridos en 2020

Los hechos se produjeron en el paseo fluvial de A Barcala, en el ayuntamiento coruñés de Cambre, en el año 2020. Según el Ministerio Público, la víctima conoció en julio al hombre a través de una red social y de esta forma continuó manteniendo contactos hasta que en agosto decidieron concertar una cita.

Sobre las 20:30 horas del 16 de agosto de ese año, ambos se encontraron en las proximidades de un establecimiento de hostelería y estuvieron allí hasta que fueron a dar un paseo a un lugar solitario. En el entorno del paseo fluvial, añade el escrito fiscal, "comenzaron a mantener relaciones sexuales consentidas", como besos y tocamientos, entre otros, hasta que el hombre le propuso mantenerlas también vía vaginal. Al contestarle éste que no tenía preservativo, ella se negó "de forma clara y tajante, repitiéndoselo en varias ocasiones".

El Ministerio Público sostiene que "a pesar de ser consciente de la voluntad en contra" de la mujer, el hombre "con intención de satisfacer sus deseos sexuales, la arrinconó y la aprisionó con su cuerpo y tras vencer así su resistencia", presuntamente, consumó la agresión sexual. Fiscalía califica los hechos de delito de agresión sexual y de un delito contra la intimidad, por la grabación de unas imágenes, por los que pide, respectivamente, seis años y seis meses de prisión y dos años y ocho meses de cárcel. Además, solicita el pago de una multa de 18.000 euros por los daños psicológicos y morales.