La Ciudad Vieja de A Coruña abandona este lunes, 25 de julio, el medievo hasta el año que viene debido al fin de la tradicional Feira das Marabillas, que comenzó el jueves 21. Esta celebración era muy esperada por los centenares de coruñeses que decidieron acercarse durante estos días de festividad tras dos años de ausencia por la pandemia y la respuesta a las actividades, gastronomía y comercio ha sido positiva, alcanzando un éxito de convocatoria con calles llenas y buen ambiente.

Dragones, monstruos del bosque y diferentes músicos y espectáculos con fuego, entre otros, han amenizado la feria, que ha contado con puestos sobre todo en las inmediaciones de la plaza de Azcárraga y María Pita y por todo el entorno de la Ciudad Vieja. Bollo preñado, kebab y pizza artesana, patatas rellenas, crepes, gofres, churros, gominolas o dulces turcos fueron algunas de las opciones para picar en este evento, que se unen a la gran afluencia que tienen puestos ya míticos de esta cita como el de la sidra asturiana o el del té moruno.

Para beber, fueron muy demandados estas jornadas cócteles tan típicos como el mojito o la piña colada o bebidas tan clásicas como la sangría. Asimismo, al margen del mercado medieval, se pudo optar también por otras opciones como pasacalles, recreaciones, obras de teatro, exposiciones, espectáculos de malabares y acrobacias, talleres infantiles, cuentacuentos o conciertos.

Cinco originales puestos

1. Lámparas de relajación

2. El Rincón de la Magia (y horóscopos)

3. Incienso artesanal

4. Babuchas

5. Cristal de Murano