Hosteleros de la Marina de A Coruña alertan de la inseguridad en la zona tras varios robos

Esta madrugada una persona ha sido detenida mientras intentaba robar en el local Pier en la Avenida de la Marina de A Coruña. El ladrón acudió primero a robar en el restaurante La Mansión 1783, que ha sufrido varios atracos en los últimos meses y al no lograrlo se dirigió a este otro establecimiento. Desde la Asociación de Hosteleros de La Marina alertan de la inseguridad que viven las y los trabajadores de la zona.

La Mansión 1783 sufrió dos robos en menos de 10 días el pasado mes de marzo, a los que se suma ahora el intento de robo de esta pasada madrugada. "El ladrón intentó forzar la puerta de nuestro restaurante y como no lo consiguió cesó en el empeño. Yo recibí el aviso de alarmas sobre las seis de la mañana y hablé con la Policía Nacional, y esta mañana vi que esa misma persona intentó entrar en el Pier después", cuenta Alberto Boquete, presidente de la Asociación de Hosteleros de La Marina.

Este ladrón fue detenido ‘in fraganti’ esta mañana después de romper el cristal de la puerta del Pier arrojando una de las sillas que estaban almacenadas en el exterior del local, y tuvo que ser trasladado al hospital para ser tratado de varias heridas.

Boquete cuenta que "este ladrón ya es un habitual" y asegura que la sensación en la zona es de "inseguridad". "Llevamos sufriendo este problema mucho tiempo. Hacen falta más efectivos de Policía Local y más medios para la Policía Nacional", añade.

"Sabemos que la Policía está sobrepasada también, no les echamos la culpa directamente, sabemos que tienen muchos casos porque este problema se está viviendo en todos los barrios de Coruña. Por eso reclamamos que les den los medios necesarios para frenar estas situaciones y preverlas", explica.

"Todos los locales han sufrido robos"

"Hace tres meses sufrimos dos robos en dos semanas y es la tónica general", relata Boquete, que cuenta que todos los locales de la Marina excepto uno han sufrido robos en el último año: "Creo que solo queda uno en el que aún no han entrado y tienen miedo por si son los siguientes".

En ese sentido, lamenta que que tengan que estar "preocupados por si en cualquier momento nos entran en el local a robar y a provocarnos destrozos".

"Además, cuando roban, pierdes también horas de trabajo mientras la Policía investiga, y después hay pocas soluciones. Pocas veces se coge a los culpables", apunta.