La Xunta ha recomendado este viernes realizar un "uso responsable del agua" en A Coruña y su comarca por el nivel en el que se encuentra el embalse de Cecebre, que está a un 73,2% de su ocupación, lo que supone un 18,4% menos que el año pasado. La recomendación se extiende al de Baiona, en Pontevedra, que está al 84%, cerca de un punto menos que hace un año.

En declaraciones con motivo del Consello Reitor de Augas de Galicia, la titular de infraestructuras, Ethel Vázquez, ha asegurado que la comunidad no se encuentra en riesgo de sequía, si bien "hay dos embalses que son los que más preocupan", refiriéndose al de Cecebre y al de Baiona.

No obstante, ha hecho hincapié en que la situación, por ahora, no es preocupante, porque en ambos sistemas hay un plan alternativo en caso de que lleguen a niveles de ocupación muy bajos que puedan comprometer el abastecimiento.

Rueda de prensa tras el Consello Reitor de Augas de Galicia (foto: Xunta)

En concreto, en A Coruña y su comarca, abastecida por el embalse de Cecebre, el agua estaría asegurada por el lago de As Encrobas; y el de Baiona está conectado al embalse de Zamáns.

Teniendo en cuenta estos indicadores, Vázquez ha destacado que Galicia afronta el verano sobre seguro pero, en cuanto a la garantía de abastecimiento y dado el nivel de estos dos embalses, ha aconsejado "estar más atentos y hacer mayor seguimiento, adoptando medidas preventivas y procurando un uso responsable del agua por parte de los ayuntamientos y de los ciudadanos".

Además, para un mayor control y seguridad, la Xunta pasará a evaluar los indicadores y a hacer seguimiento cada 15 días.

Perspectivas buenas para el verano

La conselleira ha subrayado que las perspectivas con las que se afronta este verano son buenas en general, toda vez que el pasado año el estado de la sequía prolongada arrastrada desde febrero no se pudo desactivar hasta comienzos de enero de este año, tras las lluvias de diciembre, que fueron un 60% superiores a la serie histórica.

En ese sentido, ha explicado que las lluvias fueron especialmente significativas en el mes de junio, cuando alcanzaron valores muy superiores a los habituales en esta época del año: un 105% superior a la media del período de referencia 1981-2010, con una precipitación media acumulada de 112 mm.

Además, ha señalado que las perspectivas para el mes de julio apuntan la que se registrarán valores de lluvia normales para esta época del año, o incluso superiores a la media.