Las agresiones contra comunidad LGTBIQ+ en A Coruña disminuyen, pero son "más violentas"

El número de agresiones violentas contra la comunidad LGTBIQ+ en A Coruña disminuyó en 2023, pero los ataques registrados fueron "más violentos". Así lo ha señalado, el sexto informe del Observatorio Coruñés contra la LGTBIfobia presentado por la asociación LGTBI+ ALAS A Coruña.

Bajo el nombre Una Diversidad Libre, el documento cuantifica el número de actuaciones tramitadas desde las oficinas de la propia asociación de ALAS Coruña. En 2023 la entidad registró 48 incidencias de odio, 43 de ellas por agresiones directas a alguna persona del colectivo LGTBIQ+. Es un dato menor que en 2022, pero según alertó la presidente de ALAS Coruña, Ana G. Fernández, los ataques "cada vez son más violentos", una deriva que la asociación liga al "aumento del discurso de odio" en España.

Las agresiones además afectan cada vez a un perfil más heterogéneo. Mientras en otros estudios lo habitual las agresiones se focalizaban en generaciones más jóvenes, por primera vez la asociación ha vivido un aumento de denuncias de personas mayores de 50 años.

En lo tocante al tipo de agresión, el informe especifica que 23 fueron de tipo verbal, 14 físicas y verbales, 5 de acoso, 4 contra el patrimonio, 1 de negación de servicios y 1 agresión sexual. El 60% de los ataques se produjeron en la vía pública y fuera de A Coruña, aunque la asociación no recoge datos específicos de cuántas de ellas se produjeron en cada localidad, sino que esta cifra la enmarca en el "resto de Galicia".

En términos generales, en 2023 la entidad registró 352 atenciones de 227 casos diferentes y la mayoría de ellos los completaron en sus oficinas de A Coruña (Rúa Cardenal Cisneros, 68, bajo derecha, 15007 A Coruña). "Son dous novos casos cada tres días", explico Ana G. Fernández. Las visitas se debieron en la mayoría de los casos a consultas de índole sanitaria y, en segundo lugar, de tipo social.

Preocupación por la educación sexual

La presidenta de ALAS ha alertado de la preocupación que existe en la entidad por la proliferación de prácticas sexuales no seguras. Reiteró que es necesario aumentar la educación sexual entre la población e inculcar a la misma la importancia del consentimiento y de practicar sexo seguro de ITS.

En este sentido, ha recordado que en Galicia y España está aumentando la práctica de chemsex —uso de drogas psicoactivas con el objetivo de tener relaciones sexuales durante un largo periodo de tiempo, generalmente en grupo—. Si bien ha subrayado la importancia de no juzgar desde la moral las prácticas sexuales, sino centrarse en concienciar e informar a la población sobre los peligros que pueden conllevar ciertas prácticas.

Colaboración con administraciones públicas

El Observatorio Coruñés contra la LGTBIfobia comenzó su camino en colaboración con el Concello de A Coruña y desde el 2017 contabiliza y hace seguimiento de las agresiones al colectivo. Por ello, la concejala de Bienestar Social e Igualdad, Yoya Neira, estuvo presente en el acto, donde agradeció y puso en valor el tejido asociativo de la ciudad.

Por otro lado, Ana G. Fernández, llamó al resto de administraciones a aumentar su apoyo a la lucha contra la LGTBIfobia. "Pediríalle á Xunta que se puxera a traballar", zanjó.