El economista Manuel Colmeiro y Penido (Santiago de Compostela, 1818 – Madrid, 1894) ha sido homenajeado hoy miércoles por la Real Academia Galega de Ciencias (RAGC) con motivo en el Día da Ciencia en Galicia. La entidad ha destacado el compromiso del historiador, jurista y economista santiagués con la modernización económica, social y política de Galicia.

Colmeiro es el primer científico social que recibe esta distinción por parte de la institución. "Fue un activista social convencido de que el papel transformador de la ciencia es el de luchar por una sociedad próspera y justa", destacó sobre él el presidente de la academia, Juan Lema, según recoge Europa Press.

"El profesor Manuel Colmeiro es una personalidad extremadamente activa que jugó un rol clave en la Galicia y España de la segunda mitad del siglo XIX, en una etapa particularmente convulsa", señaló Lema. Unas declaraciones a las que el catedrático y académico Juan Ramón Quintás añadió que "fue un reformador que dedicó su vida a reformar Galicia y España".

El acto celebrado este miércoles incluyó la entrega de las Medallas de Investigación de Galicia a Aurora Grandal, David Posada, Fernando Obelleiro, Jesús Salgado y Ricardo Cao. El evento contó, además, con la presencia de numerosas personalidades vinculadas al ámbito de la ciencia y de las universidades.

¿Quién fue Manuel Colmeiro y Penido?

Manuel Colmeiro y Penido se licenció en Derecho y se doctoró en Leyes en la facultad de Derecho de la Universidade de Santiago de Compostela (USC), en la que fue profesor de Política y de Derecho Político y Administrativo desde 1840. El santiagués, además, fue nombrado con solo 29 años catedrático de Economía Política y Derecho Político y Administrativo en la USC y de Derecho Político y Administrativo en la Universidad Central de Madrid.

El economista fue nombrado socio de mérito de la Real Sociedade Económica de Santiago en 1842, en la que formó parte de comisiones que estudiaron la reforma de pesos y medidas o el sistema monetario español, entre otros. En 1843, con 24 años, publica Memoria sobre el modo más acertado de remediar los males inherentes a la extremada subdivisión de la propiedad territorial de Galicia, en la que aborda dos temas fundamentales sobre la propiedad agraria, el minifundio y el sistema floral.

Consciente de que la desamortización de Mendizábal de 1836 no daba una respuesta para la modernización del agro gallego, Colmeiro fue el primer economista en visualizar que debería seguirse abogando por la redención de los foros. Así, la propiedad de la tierra sería de los propios agricultores que la cultivaban y, al mismo tiempo, se daba una solución al minifundismo.

La primera gran obra de Colmeiro en el ámbito de la Economía fue Tratado elemental de economía política (1845), una defensa abierta del eclecticismo. A lo largo de la década de 1850-1860 se acercó a los postulados de la Escuela economista española y emprende una orientación liberal, que mantendría a lo largo de su vida: su nuevo enfoque de los problemas económicos lo llevó a publicar su obra más sólida, Principios de Economía Política.

Colmeiro anhelaba un modelo de sociedad más abierta, con mayor participación ciudadana, convencido de que la principal misión de la ciencia económica era "hacer el bienestar tan general como fuese posible". El santiagués defendió la existencia de sindicatos para resolver conflictos, una legislación limitadora del trabajo infantil, el proteccionismo a las pymes, extender la educación y la beneficencia pública, entre otros.

Destacado activista social, fue diputado, senador, consejero de Estado y fiscal del Tribunal Supremo. Colmeiro también fue miembro fundador y copresidente de la Sociedad Libre de Economía Política, miembro de la junta directiva de la Asociación para la Reforma de los Aranceles de Aduanas, relator del Real Consejo de Instrucción Pública, presidente de la junta consultora del Instituto Geográfico y Estadístico y vocal de la junta de Reforma del Código de Comercio.

El economista, además, fue socio numerario de la Real Academia de Historia y socio fundador da Real Academia de Ciencias Morales y Políticas. En el ámbito internacional, fue miembro de la Real Academia de Ciencias y Bellas Artes de Bélgica, de la Real Academia de los Linces de Roma, del Instituto Imperial de Francia y del Instituto de Ginebra. Además, fue profesor honorario de las Universidades de Cracovia y de Charcov.

Una larga e importante trayectoria que le valió diversos reconocimientos: fue condecorado como comendador ordinario da Real Orden de Carlos III, Caballero de la Gran Cruz de la Orden Civil de María Vitoria y Gran Cruz de la Real Orden de Isabel la Católica. En 1992, la Xunta de Galicia creó el Premio Manuel Colmeiro para trabajos de investigación sobre la administración pública.