Detenido en Lugo un joven de 23 años tras negarse a hacer el test de alcoholemia

LUGO, 27 Dic. (EUROPA PRESS) –

La Policía Local de Lugo detuvo el sábado 25 de diciembre a un conductor de 23 años que, a pesar de presentar signos de estar bajo los efectos del alcohol o las drogas, se negó a realizar el preceptivo test y se empezó a comportar "de manera agresiva" con los agentes.

Según informa el cuerpo municipal a través de un comunicado, ocurrió sobre las 9:45 horas del día de Navidad, cuando una patrulla de la Policía de Barrio detectó por la rúa Doutor Balanza cómo un vehículo circulaba de manera "irregular".

Tras hablar con él, los agentes observaron que presentaba signos de embriaguez o de haber consumido drogas, por lo que se le requirió a someterse a las pruebas. Sin embargo, el hombre se negó "en repetidas ocasiones" a pesar de ser advertido de que su conducta "podría ser constitutiva de delito".

En ese momento, según el relato de la Policía, comenzó a portarse "de manera agresiva" hacia los agentes. De hecho, al aparecer la grúa municipal para llevarse el vehículo al depósito, porque carecía de seguro y el conductor estaba implicado en un delito contra la seguridad viaria, el individuo intentó introducirse en él para "entorpecer la labor de enganche".

Así, llegó a "cerrar violentamente" la puerta del turismo contra la mano de uno de los policías, lo que le causó "lesiones". También se tiró encima del capó del coche y lo abolló con su peso. Finalmente, los actuantes consiguieron reducirlo, inmovilizarlo y esposarlo, tras lo cual lo detuvieron. Después de ser conducido a un centro médico todavía con "una actitud agresiva", lo llevaron hasta la Jefatura de la Policía Local, donde fracturó un cristal del ‘hall’ de entrada e intentó dar patadas a los agentes. También causó daños a la puerta trasera izquierda del vehículo policial durante el trayecto.

Por estos hechos, se instruyen diligencias por dos delitos contra la seguridad vial, uno por conducción bajo la influencia de vehículas alcohólicas o drogas y otro por negarse a someterse a las pruebas. La Policía también le atribuye un delito de atentado a agentes de la autoridad, resistencia y desobediencia grave, así como de daños a la propiedad municipal.

Pruebas de alcoholemia

Por otra parte, durante las fiestas navideñas la Policía estableció diversos filtros de seguridad viaria que permitieron localizar a cuatro conductores que superaban la tasa máxima de alcoholemia permitida. Además, uno de ellos dio positivo en THC y cocaína.

El primero de ellos fue interceptado a las 2:00 de la madrugada del 24 de diciembre. La conductora fue sorprendida por los agentes locales en la confluencia de rúa Marquéz de Ombreiro con río Mandeo.

Según relata la Policía Local, estaba con el motor en marcha y dormida en el puesto del volante, de modo que se situaba sobre un paso de peatones y obstaculizaba el carril de circulación. Arrojó un resultado positivo de 0,88 miligramos de alcohol por litro, más del triple del máximo permitido (0,25) por lo que su vehículo fue inmovilizado.

Esa misma madrugada, sobre las 5:00 horas, los agentes localizaron en la rúa Ángel López Pérez a otra conductora que presentaba signos de embriaguez y que, tras ser sometida a las pruebas, arrojó una tasa de 0,78, por lo que se instruyeron diligencias por delito contra la seguridad viaria en modalidad de juicio rápido.

Pero los casos más graves se produjeron el domingo, 26 de diciembre. Sobre las 13:00 horas, un conductor que circulaba de manera "irregular" fue interceptado por la avenida das Fontiñas y dio un resultado de 0,58 miligramos por litro en el test de alcoholemia. No obstante, también dio positivo en THC y cocaína en la prueba de drogas practicada, por lo que el hombre se someterá a una posible sanción de 2.000 euros y a la retirada de 12 puntos en el carné de conducir. También se le inmovilizó el coche.

Asimismo, también el domingo sobre las 21:00 horas, el equipo de Atestados de la Policía Local fue requerido por la Guardia Civil porque habían detenido a un conductor en la Avenida Infanta Elena. Al presentar signos de embriaguez, fue sometido a la prueba de detección alcohólica, en la que dio positivo con una tasa de 1,19, casi cinco veces la máxima permitida. Por eso, se instruyeron diligencias por delito contra la seguridad vial en modalidad de juicio rápido y su vehículo quedó inmovilizado.