LUGO, 4 Ene. (EUROPA PRESS) –

La Policía Local de Lugo ha interceptado en la madrugada de este martes a una conductora que, tras saltarse una señal de stop, circular por el sentido contrario y derribar unos tablones de protección de la terraza de un local de hostelería, triplicó la tasa máxima de alcoholemia permitida.

Según ha informado la Policía Local, sobre las 03:45 horas de este 4 de enero una patrulla del Grupo Operativo Nocturno detectó un turismo que no respetó la señal de stop en la confluencia de la calle Conde con Río Eo.

Los agentes, para tratar de identificar a la conductora, le dieron el alto, pero en lugar de detenerse, han destacado las mismas fuentes policiales, continuó la marcha "invadiendo el sentido contrario" al girar hacia la calle Sierra de Ancares, donde derribó unos tablones de protección de la terraza de un local de hostelería. Siguió la marcha y finalmente fue interceptada en la calle Fraga.

Al hablar con la conductora, de 53 años, los agentes constataron que presentaba "signos de hallarse embriagada", por lo que fue sometida a las pruebas de detección alcohólica, en las que obtuvo positivo de 0,86 mg/l, que supone más del triple de la tasa máxima permitida. Por ello, esta conductora fue trasladada a la Unidad de Atestados del Cuerpo, donde se han instruido diligencias por un delito contra la seguridad vial en la modalidad de juicio rápido y el vehículo quedó inmovilizado.

La Policía Local señala que esta conductora se enfrenta a una pena de prisión de tres a seis meses o a la multa de seis a 12 meses o trabajos en beneficio de la comunidad de 31 a 90 días y, en cualquier caso, a la privación del derecho a conducir vehículos a motos y ciclomotores por tiempo superior a uno y hasta cuatro años.